¿Cómo hacer realidad tus objetivos profesionales de 2017? En primer lugar, tomate el tiempo necesario para elegir metas que realmente tienen un significado para vos y anotalas por escrito. Cuando escribes tus deseos, tenés más posibilidades de fijarlos de verdad en tu mente, según publica el sitio formacionyestudios.com.
Coaching para lograr tus objetivos de 2017
Desear es muy fácil. Poner en práctica esos deseos ya es más complejo porque requiere esfuerzo, constancia y concentración. Por esta razón, es fundamental que concretes cuáles son tus metas principales. Reducilas a un máximo de tres. De este modo, tendrás una mejor disposición de concentración.
Establecé un plan de acción concreto, realista y alcanzable para alcanzar esa meta. Un plan de acción en el que la responsabilidad esté en vos. Es decir, no te dejes condicionar por supersticiones de buena o mala suerte.
Además, enfocá tu objetivo de forma positiva. Por ejemplo, en lugar de marcarte como meta conseguir vivir de tu blog a nivel profesional, comenzá por marcarte la meta de escribir cada día un nuevo post. Y de este modo, la idea de profesionalizar tu trabajo como blogger será una consecuencia directa de tu propio estilo de trabajo.
Tu plan de acción debe estar concretado en acciones específicas que te ayuden a lograr tu meta. Por ejemplo, si querés vivir de tu blog, escribe en tu agenda cuáles son las características de los artículos que vas a publicar, concreta un calendario editorial de actualizaciones para no dejar la inspiración a la improvisación del momento. Creé en vos mismo, convertí tu experiencia previa en el mejor sentido de tu presente porque hoy sos más sabio que al inicio de tu carrera profesional. A su vez, si estás en la etapa inicial, tenés todo el potencial y la fuerza que surge de la juventud para imaginar posibilidades.
Elegí objetivos que rozan tu corazón
Con mucha frecuencia, los profesionales se marcan objetivos de forma mecánica y rutinaria cada mes de enero. No caigas en 2017 en este error repetido. Elegí objetivos que sean importantes para vos. Metas que tengan un porqué y un para qué. Es decir, una causa y una finalidad. A partir allí, concreta qué puedes hacer a partir de este mismo instante para estar más cerca de tu meta. Recorriendo la distancia que separa el estado presente de ese punto potencial.
Además, date permiso para cambiar de opinión. Porque puede ocurrir que un objetivo que en un primer momento te pareció importante, deje de serlo. No renuncies a la pasión de hacer aquello que realmente te gusta, es decir, tu vocación. Cada año, nuevos emprendedores deciden invertir tiempo e ilusión en un proyecto propio. Buscá inspiración en aquellos profesionales que con su ejemplo, te envían un mensaje positivo.