Un grupo de arqueólogos encontró restos humanos de hace más de 40 mil años en el noreste argentino. El hallazgo se produjo en en Antofagasta de la Sierra, Catamarca, en un sector que comparte con Salta.
"Tuve suerte, encontramos una aguja en un pajar", dijo al diario El Tribuno Carlos Aschero, un reconocido arqueólogo que dirige la investigación en una cueva donde se descubrieron los elementos prehistóricos que pueden marcar un antes y un después en el mundo científico.
La cueva, que también tiene pinturas rupestres y restos culturales de otros períodos, se encuentra a cuatro kilómetros del límite del departamento salteño Los Andes. Todo ese sector fue el hábitat, hace 40 mil años, de los cazadores y recolectores cuya existencia ahora se empezó a descubrir.
En el sitio se encontraron dos mechones de pelo humano, que pueden ser la punta del ovillo de estudios genéticos que podrían abrir la puerta a descubrimientos inconmensurables sobre los orígenes de los pueblos americanos.
Se hallaron, además, herramientas de piedra tallada utilizadas para corte y raspado, unos pendientes de cobre y excremento y fragmentos de huesos de animales que formaron parte de fauna ya extinta.