El especialista en Telecomunicaciones de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) Ariel Garbarz dio detalles de la reunión que mantuvo con los investigadores del caso Santiago Maldonado y reclamó al gobierno nacional que informe a la Justicia la ubicación de las antenas instaladas en el Sur, para poder determinar dónde estaba el joven y los efectivos de Gendarmería al momento de la desaparición.

"Si el gobierno tiene interés en encontrar a Maldonado, el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) debe informar dónde están las antenas para rastrear los últimos movimientos del celular del joven desaparecido y de los gendarmes”, dijo Garbarz, quien se desempeña como director del laboratorio de Seguridad de la Comunicaciones de la UTN y ya ofreció asistencia a la Justicia para investigar los últimos movimientos del celular de Santiago Maldonado y los gendarmes.

Según alertó Garbarz, en el expediente todavía no hay pruebas que permitan dar con el paradero del joven artesano desaparecido hace casi un mes. "No hay porque no se produjeron las pruebas necesarias para avanzar en la investigación, por lo menos en la punta del ovillo, que es la llamada que se recibe al celular de Santiago el día posterior a su desaparición" del primero de agosto pasado, explicó el experto.

El rastreo de las señales de celulares captadas por las antenas de los alrededores Esquel y El Bolsón permitiría conocer la supuesta ubicación de Maldonado, pero también de al menos 40 celulares de gendarmes activados que participaron del desalojo en la comunidad mapuche de Pu Lof, en el departamento chubutense de Cushamen. "Con eso sabemos la cercanía o no de los gendarmes de Santiago, o la trayectoria del día anterior. No se hizo ni siquiera la triangulación elemental que ordena cualquier juez, que se ordena en un caso común", enfatizó Garbarz.

Los peritos asignados a la causa son de la Policía Federal. Tras el cambio de carátula a desaparición forzada, la Gendarmería ya no puede intervenir en la pesquisa. "No están en Esquel, están En la Capital, no tienen ni siquiera dónde están las antenas. No le pidieron al juez que le pida al Enacom dónde están las antenas, desde donde se empieza a hacer el cálculo de triangulación básico, para saber al menos qué celda era la tomó la señal de los celulares", sostuvo el director del laboratorio de Seguridad de la Comunicaciones de la UTN.

La geolocalización se lograr al identificar el momento y lugar donde se activa la primera antena, que luego se une con los puntos que brindan otras dos señales "pasivas" del teléfono captadas por otras torres sin que le presten el servicio. Esta metodología se utilizó en la causa por las escuchas ilegales que tuvo procesado Mauricio Macri, en el asesinato de Mariano Ferreyra y en la muerte de Alberto Nisman.

En el primero de los casos sirvió para conocer los trayectos del espía Ciro James con los cassettes que retiraba de la SIDE y luego se dirigía al Ministerio de Seguridad porteño, previo paso por Barrio Parque. En el segundo, gracias a la triangulación fina, se supo la localización de los militantes del Partido Obrero, de los sindicalistas y la policía. En el caso Nisman informaron los movimientos de las personas que se acercaron al fiscal el fin de semana del fallecimiento.

Los ingenieros de la UTN están dispuestos a viajar a Esquel para trabajar en el caso Maldonado. "Le dijimos que necesitamos que le pida a Movistar información de la antena que tomó la señal y a la Enacom, que antes era la Comisión Nacional de Telecomunicaciones, porque ahí están las direcciones exactas de las antenas. Le pedimos la fiscal que los pida urgentemente y viajamos", detalló Garbarz, aunque remarcó que el organismo que antes dirigía Oscar Aguad y ahora lo absorbió el Ministerio de Modernización de Andrés Ibarra, que podría haber actuado de oficio. "No hay colaboración de la Enacom, si el Gobierno dice que tiene interés en encontrar a Santiago Maldonado, en los hechos no lo está demostrando, porque lo primero que tiene que hacer es darle los datos de las antenas de Esquel y El Bolsón al juez", afirmó el académico.

El especialista contó que la fiscal Silvina Ávila lo consultó 29 días después de la desaparición sobre el estado de preservación de la información de telecomunicaciones. Según Garbarz, el juez o la propia fiscal deberían haber ordenado a las telefónicas preservar los metadatos o poner un policía en la puerta de cada estación radiobase para que nadie vaya a borrar los datos. Igualmente, recordó que las empresas tiene que guardar al menos un año los datos, porque se utilizan luego para facturarse el alquiler de las torres entre compañías, incluso de la Argentina y Chile. "En principio, la telefónica los tiene que tener, si alguien no fue a borrarlos. Si no colaboran, tiene que ir a la Enacom. Por ahora se solicitaron oficios a la telefónica chilena, pero les aclaré que también esos datos los tienen las argentinas", aseveró el ingeniero en electrónica y en telecomunicaciones.

El sitio opensignal.com brinda mapas sobre la cobertura de telefonía móvil en todos los rincones del mundo, según las antenas instaladas en cada país. De la Argentina posee datos actualizados al 20 de julio pasado. En la imágen que acompaña la nota se puede observar la intensidad de la señala de celulares 2G, 3G y 4 G de Movistar, la compañía que tenía Maldonado en uno de los tres teléfonos que le adjudican que poseía.