“Todo lo que yo quería era tener una estabilidad financiera. No me siento cómoda hablando de dinero”, señaló en entrevista para la revista Rolling Stone.
Beyoncé, famosa por sus canciones pero más por sus curvas pronunciadas, tan sólo en el año de 2006, la fortuna de la artista creció en 16.1 millones de dólares, entre la venta de discos, shows y publicidad. Se estima que este año ese valor deberá triplicarse con la venta de dvd’s de Dreamgirls, además de su nuevo álbum y una gira mundial.
Además de todas esas fuentes de ingresos, el enamorado de Beyoncé, el rapero Jay-Z, vendió una marca de ropas por más de 200 millones de dólares a inicio de esta semana.