Habilitado en el año 1933, ofrece todas las comodidades para gozar de la playa y el sol frente al majestuoso río Paraná. Está integrado por dos espacios habilitados para uso balneario: el predio concesionado y la playa pública.
Los rosarinos veranean en esta zona desde fines del siglo XIX y el paisaje que lo circunda en la actualidad ofrece chalets antiguos y modernos rodeados de jardines.