Nueva Zelanda vive su momento más oscuro. Un hombre mató a 49 personas e hirió a otras 48 al irrumpir en dos mezquitas de la ciudad de Chrischurch con un arma semiautomática. Para el gobierno fue un ataque terrorista. Hay cuatro detenidos, entre ellos el principal sospechoso, que sería un joven supremacista blanco de origen australiano. El terrorista llevaba una cámara en su cabeza y filmó y trasmitió en vivo la masacre por Facebook Live.
Según informó EFE, el ataque se produjo a plena luz del día y en momentos en que centenares de musulmanes realizaban la oración de los viernes. El terrorista mató a 41 personas en la mezquita de Al Noor, muy cerca del Jardín Botánico, y a otras 7 en la mezquita de Linwood, a unos 6,5 kilómetros al este de la primera.
Otra persona murió después en un hospital de la ciudad donde se atiende a unas 48 personas heridas de bala, entre ellos niños.
El ataque de Al Noor fue transmitido en vídeo durante 17 minutos por el atacante y en las imágenes se ve cómo el individuo recorre las habitaciones de la mezquita y dispara con armas semiautomáticas contra personas indefensas.
"Está claro que esto solo puede ser descrito como un ataque terrorista. Por lo que sabemos, parece haber sido bien planeado", dijo la primera ministra, Jacinda Ardern, en una conferencia de prensa desde Wellington.
El agresor, que vestía ropa militar y habría publicado en las redes sociales un manifiesto con calificativos peyorativos contra los musulmanes, se cree que es Brenton Tarrant, un ciudadano australiano de 28 años de edad de la localidad de Grafton.
Sin embargo, la policía local no confirmó su identidad y señaló que hay otras tres personas detenidas. Con todo, el comisionado Mike Bush sí confirmó que hay un acusado que este sábado “comparecerá ante los tribunales”.
Tras los tiroteos, la apacible ciudad de Christchurch, que quedó devastada en 2011 por un terremoto que mató a 185 personas, quedó temporalmente bajo confinamiento.