Desde este jueves, voluntarios lanzan una campaña para juntar agua potable para el barrio Toba de Rosario, ya que advierten que allí solo hay una canilla comunitaria para proveer a todos los habitantes de esa barriada. Frente a esta situación, el gerente de Relaciones Institucionales de Aguas Santafesinas (Assa), Guillermo Lanfranco, advirtió que esa movida “es un sinsetido” y aseguró que “Rosario tiene una cobertura de agua de prácticamente el 99 por ciento”. Y ante denuncias de los vecinos, indicó que la ciudad “no registra enfermedades hídricas desde hace décadas”.
En contacto con el programa Radiópolis (Radio 2), el vocero de Assa comentó: “Entiendo la buena voluntad de realizar una campaña, pero realmente es un sinsentido”.
Luego amplió: “Rosario tiene una cobertura de agua de prácticamente el 99 por ciento, una ciudad que no registra enfermedades hídricas desde hace décadas, hace muchísimo tiempo, y tiene una calidad de agua excelente, reconocida por los mismos rosarinos y por organismos que han estudiado las características hídricas de la ciudad”.
Lanfranco explicó que “hay que distinguir dos situaciones distintas: lo que se llama el radio servido, que son las zonas que tienen una división clara de manzanas, inmuebles identificados y donde las redes son formales; y otra parte de la ciudad que es aproximamndamente un 10 por ciento, unas 35 mil familias, que tienen acceso al agua por fuera de las redes formales, pero que tienen acceso al agua potable porque si no tendríamos un registro de enfermedades hídricas”.
“Desde hace dos años estamos trabajando en esos barrios para mejorar la calidad del agua, aunque no es responsabilidad directa de Aguas Santafesinas porque son conexiones irregulares que no se limitan al agua; también son barrios con problemas de acceso a otros servicios como la energía”, detalló. Y agregó que la dificultad se da porque “son barrios que ni siquiera tienen una traza, no tienen calles tienen pasillos”.
“Lo que estamos tratando de hacer es mejorar los puntos de conexión para que no haya fugas, trabajando junto con los vecinos para que ellos mismos puedan mejorar esa red que está hecha por mangueras o mangueritas, para que puedan trabajar nuestras cuadrillas”, continuó Lanfranco.
El vocero de Assa puntualizó que “no es un problema solamente del servicio del agua potable; si yo vivo en una vivienda donde las paredes son de cartón o de chapa, si el piso es de tierra, o si esos barrios están muy lejos de la red formal, se dificulta mucho el trabajo”.
Por último, Lanfranco dijo que “en los últimos años hemos mejorado el servicio a unas 1.500 familias en la ciudad”.