Música y películas a todo volumen, todo el día. Gemidos sexuales y partidos de fútbol a cualquier hora. Los vecinos de Paraguay al 1100 hace años ya que no pueden descansar, ni siquiera asomarse al balcón o dejar alguna ventana abierta por el alboroto que les llega de la comisaría 2ª.
“Están de campamento, no están detenidos”, se quejó una vecina que mantuvo su identidad anónima, en contacto con el programa Radiópolis (Radio 2). La mujer contó que hace tiempo sufren los ruidos molestos, pero que “se agudizó con la pandemia” y se profundizó en los últimos dos años.
La seccional tiene capacidad para 16 detenidos, pero adentro habría unos 60.
“La música es continua desde la mañana hasta altas horas de la madrugada. Juegan a la pelota, es prácticamente en un camping. Anoche (por este domingo) miraban películas. Uno no se puede asomar al balcón porque te gritan. Hay que tener todo cerrado herméticamente para poder dormir un poco”, se quejó.
Contó que otros vecinos han ido a la seccional de Paraguay 1123 para denunciar la situación, pero no se revierte. “Lo dejan asentado pero nunca sigue todo igual”, criticó y señaló que incluso se puede ver a policías compartir momentos con los detenidos. “Miraban los partidos de la Selección todos juntos”, observó.
“Están de campamento, no están detenidos, están tranquilos divirtiéndose mientras que uno tiene que ir a trabajar y no puede descansar. Es todo el día, desde las 8 de la mañana hasta las 3, 4 de la madrugada”, cerró.