En la tarde de este lunes, luego del cortejo que despidió el cuerpo de César Roldán, el chofer que murió asesinado de siete tiros el pasado sábado cuando prestaba servicio, los vecinos de Fisherton se autoconvocaron en acompañamiento de su familia, y su esposa, Belén, se mostró agradecida por el gesto.
Desde las 19 los vecinos se acercaron con flores, oraciones y velas de varios tamaños y colores encendidas, que dispusieron junto al ingreso de su casa, en un abrazo solidario a la familia.
Belén, esposa de César, salió junto a sus dos hijos a agradecer el gesto a todos los vecinos: “Me hace bien tanto cariño de la gente. Me da mucha fuerza para seguir adelante”. Y luego consignó: “Lo único que quiero es que se averigue qué pasó. Quiero pedir al intendente y al gobernador que esclarezcan algo. Me dijeron que iban a hablarme. El fiscal me dijo que no era para Cesar el ataque, y no creo que sea para ningún chofer”.
Luego destacó en Telenoche (El Tres) que al abrazo también se acercaron “compañeros de Movi, y decenas de vecinos que lo conocian, hasta pasajeros, se acercaron muchos a decirme lo educado y noble que era”. Entonces destacó: ““Esto es ejemplo de lo que era él. La mayoria del barrio lo conocía. Solucionaba todo con una sonrisa y una palabra de aliento. Se dijeron mentiras de no creer sobre él, cuando trabajaba todo el día para darle el mejor ejemplo a mis hijos”.
La pareja de uno de los compañeros de César Roldán compartió: “Tenemos sentimientos de impotencia, y con miedo de subirse al colectivo, porque ellos están en una situación de desproteccion total. Pueden matar así a las tres de la tarde, con total impuntidad. Pero decirle a la familia que estamos para lo que necesite”
Un vecino de Fisherton que no conocía al hombre asesinado se acercó para compartir “la tristeza del rosarino, porque era un vecino como nosotros. No podemos tener este miedo de estar en la calle, acá nos criamos, y los políticos no hacen nada".
Movilizacion de familiares de victimas
En simultáneo con el abrazo solidario a la familia de César Roldán, en Balcarce y el río se movilizaron decenas de familiares de víctimas de homicidios de la ciudad que al momento no tuvieron resulución, en solidaridad con el caso y en reclamo de esclarecimiento.
Entre los carteles y remeras se podía ver a los familiares de Mauro Villamil, Ivana Garcilazo, Joaquín Pérez, “Oso” Cejas, y del policía que murió hace pocas semanas cuando trabajaba en la garita frente al hospital Provincial, Leoncio Bermúdez.
Un familiar destacó: “Estamos pidiendo justicia, no venganza. Cada familiar son personas inocentes que perdieron la vida por falta de presencia del Estado”. Y adelantó que “desde la semana que viene habrá carteles cón llamado a la solidaridad en los colectivos, con causas sin detenidos, como por ejemplo el de Damián Lucero”, mostrando un cartel de los que serán colocados en cada unidad.
En la movilizacion estuvieron colectiveros compañeros del chofer asesinado, y una colectivera precisó al móvil: “Falta seguridad, no hay policías. Queremos salir a trabajar y saber que vamos a volver a casa”.
Poco después varias trabajadoras de She Taxi se sumaron con una decena de unidades para ser parte de la expresión de los familiares con carteles en Balcarce y el río, donde cortaron una mano de la avenida Wheelwright.