Gareth y Nataliia, dos personas mayores que viven en Gales, viajaron a Eslovaquia para salvar a su hija, a su nieta llamada Albina y a su perro, de la guerra con Rusia. Los abuelos tomaron esta decisión luego de ver informes sobre enfrentamientos cercanos a donde vivían la niña y su madre.

La familia se reencontró en la frontera de Ucrania con Eslovaquia, Aunque, debido a la ley marcial, el padre de Albina debió quedarse en Ucrania.

"Estamos muy contentos de que hayan llegado a la frontera. Ellas están bien y eso a nosotros nos levantó mucho el ánimo", dijo Gareth a la BBC.