El malestar expresado nuevamente esta semana por el Sindicato de Peones de Taxis de Rosario (SPT) por el incremento, según denunciaron, de la cantidad de unidades del sistema Uber en las calles de la ciudad, donde hoy es ilegal, volvió a poner el foco en el debate de una posible regulación, aunque continúa sin tener consenso en el Concejo, mientras en simultáneo un escenario similar se replica en otras partes de Argentina, como ocurre actualmente en Puerto Iguazú (Misiones).
El SPT se declaró el último martes en estado de alerta porque ven cada vez más coches de Uber operando en las calles de Rosario. Por eso, le reclamaron más controles al municipio.
Tras una reunión con la Secretaría de Control y Convivencia, Horacio Yanotti, el secretario general del sindicato, señaló que se fueron conformes porque los operativos existen. “Lo han demostrado con documentación”, dijo en Radio 2.
“Hay secuestros y las multas son muy altas. Salimos con un compromiso de aportar información sobre los sectores en los cuales están trabajando estos transportes ilegales”, abundó.
Pese a que la app de transporte funciona desde hace varios meses en Rosario, la misma no está habilitada por lo que se considera que es un servicio ilegal. Si bien en un principio se planteó la posibilidad de encuadrar a Uber dentro de la normativa municipal, que sería hacer que solo se puedan ofrecer viajes en taxis y remises habilitados, lo cierto es que no hay consenso con respecto a esto.
Se trata de un debate abierto y una problemática que se replica, desde hace varios años, en distintos lugares de Argentina. Es el caso de Puerto Iguazú, en Misiones, donde esta misma semana Uber anunció su desembarco, pese a que, como en Rosario, no está regulado.
Fredi Ríos, referente de taxistas y remiseros de esa ciudad, explicó que si bien “las informaciones están” en relación al anuncios de la llegada de Uber en la calle viven “otra realidad”, dando a entender que dicho sistema, aunque está, no tiene demasiada aceptación.
“Hace casi cuatro años que vienen haciendo ese lanzamiento, pero nuestras ordenanzas nos protegen bien. Tenemos el apoyo del intendente, los concejales y la totalidad de taxistas y remiseros de Iguazú”, sostuvo en Radiópolis (Radio 2).
Tal como lo hizo en otras ciudades argentinas, Uber anunció su “próximo lanzamiento” en Iguazú luego de hacerlo en Bariloche, Ushuaia y San Martín de los Andes, según publicó el medio La Voz de Cataratas el martes pasado.
Otra voz que se manifestó al respecto en Rosario fue la de Marcelo Díaz, referente de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis (Catiltar). “Es un problema generalizado en todo el país, venimos dando una lucha, aggiornándonos con la tecnología para mejorar el servicio”, explicó en Cada Día (El Tres) este miércoles.
Si bien mencionó que la Secretaría de Control detecta “entre 15 y 20 autos ilegales por mes” en la ciudad, expresó su preocupación porque se necesitan “controles más estrictos”.
En un contexto inflacionario y con los usuarios cuidando el bolsillo, Díaz analizó que, en ocasiones, “la gente opta por tomarse un auto con una aplicación ilegal que le sale más barato” pero no contempla cómo esa decisión puede repercutir en el sistema de taxis y remises.
Por dónde pasa el debate en el Concejo
Si bien en un principio se planteó la posibilidad de encuadrar a Uber dentro de la normativa municipal, que sería hacer que solo se puedan ofrecer viajes en taxis y remises habilitados, lo cierto es que no hay consenso con respecto a esto en el Concejo rosarino.
“Yo he sido la que planteó la regulación de Uber hace 3 años y eso no tiene consenso. Lo que se va a discutir es la aplicación obligatoria para servicio público de taxis y remises. Uber es un sistema de transporte privado y es una discusión muy lejana. Hoy Uber es ilegal porque no hay consenso para regularizar”, detalló en De boca en boca la presidenta del Concejo, María Eugenia Schmuck.
Con respecto a la aplicación obligatoria, desde el oficialismo apuntan a que todos los taxis y remises de la ciudad tengan que estar activos en la App Movi Taxi o cualquier otra que garantice que los vehículos que ofrece para hacer viajes tengan habilitación municipal.
Cabe destacar que, de acuerdo a la normativa vigente, ninguna de las aplicaciones que funcionan actualmente en Rosario tienen un marco regulatorio. Es decir, tanto Uber como Movi Taxi como She Taxi, podrían considerarse como ilegales. La diferencia se da en que el servicio diseñado por la empresa estadounidense ofrece alquilar automóviles particulares que no tienen ningún tipo de control y las otras dos funcionan con vehículos regulados por el municipio.
“Esto requiere que se trate de urgencia. Hay niveles de acuerdo importantes y, a nuestro juicio, mejoraría muchísimo la calidad del servicio. Por eso vamos a insistir en las próximas semanas”, remarcó Schmuck.
En esa sintonía, hay también un proyecto de Ciudad Futura que busca fomentar el pago electrónico de los viajes, una de las principales facilidades que ofrece Uber y que nunca se logró implementar con Movi.
Si bien desde 2018 que la app de los taxistas ofrece el pago virtual, la mayoría de los vehículos no cuenta con esta posibilidad. Según sostienen los titulares, las comisiones que les cobran por ofrecer este servicio lo hace poco rentable.
Ante esto, la iniciativa de Ciudad Futura propone que los taxistas tengan bonificado el sistema Munipost del Banco Municipal. Con esto apuntan a que el pago virtual sea más rentable para ellos y así incentivar su uso.
Estos proyectos, y otros tantos que se presentaron en los últimos años, serán los que van a comenzar a discutirse en la comisión de Servicios Públicos, por el momento, sin fecha cerrada para que el tratamiento pase al recinto.