El Reino Unido tiene planificada una millonaria explotación petrolera en el territorio de las Islas Malvinas, según publicó el medio británico The Telegraph. De concretarse, sería la primera perforación en la historia del archipiélago argentino, con la que se podrían extraer un estimado de 500 millones de barriles del estuario de la Isla de los Leones Marinos, ubicada 240 kilómetros al sur de la Isla Soledad.
Se trata de una región clasificada como "clase mundial" por la cantidad y calidad de sus reservas.
El Gobierno británico dará inicio a "un período legal de consulta" para los isleños que se extenderá desde el 24 de junio hasta el 5 de agosto de 2024, para conocer si los pobladores respaldan el plan de explotación petrolífera. La nota que comunicó la operación llevó la firma de Andrea Clausen, directora de recursos naturales de la administración británica, y fue publicada el pasado lunes 24 de junio.
La etapa inicial de la explotación hidrocarburífera, prevista para 2025, contempla la perforación de 23 pozos.
El plan establece la concesión del área petrolera adquirida por Rockhopper Exploration PCL en 2010, una pequeña empresa con sede en Londres y en las Malvinas que desde hace años buscaba inversores que respalden el proyecto. Tras varias frustraciones, en 2020 se asoció con Navitas Petroleum, una compañía israelí que aportó el capital necesario para pasar de la exploración a la explotación.
Reino Unido calcula que en la Isla de los Leones Marinos hay un total de 1.700 millones de barriles de petróleo. Se trata de un yacimiento varias veces más grande que Rosebank, el mayor desarrollo planificado para el Mar del Norte de Reino Unido, que contiene aproximadamente 300 millones de barriles. De concretarse la operación, la mayor parte de las ganancias irían a los accionistas en Israel y Estados Unidos, precisó The Telegraph.
El petróleo de la Isla de los Leones Marinos sería procesado por un buque flotante de producción, almacenamiento y descarga, con camiones cisterna que llevarían el petróleo para venderlo en los mercados energéticos mundiales, agregó el diario londinense. Actualmente, la economía de la isla depende de la cría de ovejas y de la pesca.
El anuncio se produce cerca de las elecciones generales de Gran Bretaña, en las que se prevé el regreso del Partido Laborista después de 14 años de dominio tory. Aunque los laboristas, liderados por Keir Starmer, afirman que prohibirán toda nueva exploración de petróleo y gas en aguas británicas por los daños ambientales, la postura no incluye a las Malvinas: es que la administración local del archipiélago tiene voz y voto sobre los derechos de perforación en las aguas circundantes.
La ordenanza de las "Falklands" sobre Minerales Offshore requiere que los proyectos de extracción estén sujetos a un proceso detallado de evaluación de impacto ambiental, que en el caso de la Isla de los Leones Marinos ya fue documentada y está a la espera de revisión durante el período de consulta pública.
John Birmingham, legislador electo y titular adjunto de Recursos Naturales, remarcó la importancia de administrar cuidadosamente los impactos medioambientales y proteger el entorno único de las islas, pero los beneficios económicos conspiran contra las prescripciones ecológicas. "Los hidrocarburos de la costa tienen el potencial de ser una parte significativa de nuestra economía en las próximas décadas", detalló el funcionario kelper.
Un portavoz de Uplift, grupo ecologista que brega por la eliminación progresiva del petróleo y el gas, advirtió que “las emisiones de la producción de la explotación se sumarán a las emisiones del Reino Unido contabilizadas para su Contribución Determinada a Nivel Nacional, que el Reino Unido ya está lejos de cumplir”.
El reclamo argentino de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes comenzó el 3 de enero de 1833, cuando Reino Unido ocupó ilegalmente las islas, expulsó a las autoridades argentinas e impidió la radicación de argentinos provenientes del territorio continental. Desde entonces, Argentina protesta regularmente por la ocupación británica y ratifica su soberanía.