Este lunes retomaron los vuelos comerciales a la provincia de Santa Fe en conexión con Buenos Aires. En el inicio de esta prueba piloto, el trayecto unió Ezeiza con Rosario pero con una escala en la capital de la provincia. “Es lo que en la industria le llaman un vuelo consolidado”, explicó el director del aeropuerto, Eduardo Romagnoli.

En diálogo con A Diario (Radio 2), el titular de la terminal aeroportuaria explicó que “como había relativamente pocos pasajeros, hicieron esta ruta, después con el tiempo iremos mejorando y seguramente irá creciendo la cantidad de pasajeros”.

Al mediodía de este lunes arribaron a la ciudad 13 pasajeros provenientes de Buenos Aires y partieron rumbo a la Capital Federal 19 personas desde Rosario. De acuerdo a Romagnoli,  lo que incide mucho en esto es que los vuelos se hacen desde y hacia Ezeiza. “Es agregar tiempo de traslado, logística, Ezeiza queda cerca en cuanto a distancia, pero insume muchos minutos”, indicó. 

Así arribaba el primer vuelo regular al aeropuerto de Rosario este lunes. (Alan Monzón/Rosario3)

Pese a esto, el director del Aeropuerto Internacional de Rosario se mostró optimista con, con el tiempo,  la  situación se irá normalizando. “Estamos retomando la actividad después de 7 meses de estar parados, las aerolíneas van a ir viendo cuál es la cantidad de asientos llenos con la que parte un avión, cómo funcionan las ruta. Nuestra ruta es Bs As - Rosario, al menos hasta enero partiendo desde Ezeiza, en el momento en el que habiliten Aeroparque estaríamos volviendo a la normalidad”, aseguró Romagnoli.

Con respecto al protocolo para viajar, el funcionario contó que el aeropuerto de Rosario cuenta con todas las medidas de bioseguridad, además de exigir el certificado de circulación y la declaración jurada de la provincia en la que se detalla el estado de salud y la necesidad de realizar un vuelo interprovincial.

 “Un pasajero que llegue a nuestra terminal, va a tener que hacerlo 2 horas antes del vuelo, podrá ingresar al aeropuerto únicamente el pasajero, afuera del edificio habrá un chequeo de identidad, que debe coincidir con el ticket por pasaje, después hay una primera etapa de sanitización, y adentro hay una cámara inflarroja ultrasensible, que va a indicar si ese pasajero tiene la temperatura aceptable para poder viajar”, explicó.