“Por Dios, hermanito, cómo voy a extrañar reírme así con vos. Eso eras, pura risa para todo. Volá alto, amor de la hermana, brillá e iluminanos para poder soportar semejante dolor”. Las palabras cargadas de pesar son de Flor, hermana de Lautaro “Lato” Leandro, un rapero de 22 años oriundo de Villa Fiorito, provincia de Buenos Aires, que el fin de semana viajó a la ciudad de Santa Fe con intenciones de comprar una moto y fue asesinado en una emboscada en barrio Coronel Dorrego. El caso tiene un detenido. Lato era velado este martes en Lomas de Zamora, en un contexto de profunda conmoción.

El domingo por la tarde, el joven llegó a calle Larrea al 1600 de la capital provincial, previo pactar la compra de una moto Honda Tornado que había sido publicada en la plataforma de internet Marketplace. No estaba solo. En el Chevrolet Astra estaba su hermano y una pareja amiga. Según trascendió, había llevado su PlayStation como parte de pago. Un viaje de cuatro horas en busca de precio. Todo terminó mal: los presuntos vendedores eran en realidad asaltantes que, en una acción despiadada, le dispararon para robarle.

Así lo contó su hermano: "Cuando nos citaron yo le dije a Leandro que pasemos para ver más o menos el panorama. Él se bajó, reconoció a quienes habían negociado con él y empezó a charlar. Después de hablar un rato, mi hermano me dijo que querían ir a probar la PlayStation a una casa. Yo ahí le dije que al auto no iban a subir. Tras ese cruce de palabras, él gritó: «Corran». Y yo aceleré. Mi hermano le sacó como media cuadra y, cuando escucho los disparos, veo que cae desplomado por el espejo retrovisor”.

Lato agonizó en el Hospital Cullen santafesino hasta el lunes. Un disparo le había destrozado el cráneo. En el hospital estuvo su padre, quien dijo que su hijo había intentado hacer la transacción “contra su voluntad”.

“Primero le dije que no venga, además de que desconfiábamos. Pero él igual cuando llegó su hermano de trabajar, le pidió que lo acompañara, así que vinieron hasta la ciudad”, dijo.

El caso tiene detenido a Iván Oscar Carrizo, que previo a quedar en prisión preventiva este martes por el delito de homicidio fue llevado a una rueda de reconocimiento en donde fue exhibido a una testigo del caso, que según indicaron fuentes judiciales, lo reconoció de inmediato.

Desde Villa Fiorito, familiares y amigos aún no pueden entender lo que ocurrió. Florencia, hermana de Lautaro, manifestó: "Era un pibe trabajador, lo hizo hasta el último día de su vida para juntar peso por peso para la moto que era su sueño".

"Un pibe de barrio, que la peleó desde siempre. Su sueño era salir adelante y nombrar a su barrio. En todas sus canciones nombra a su barrio, Fiorito. Tenían su productora, desde los 12 años que hace música. Mi hermano tenía su trabajo oficial y changas extras para poner plata en su estudio de música", lo describió.

Lautaro trabajaba para la municipalidad de Lomas de Zamora y hacía "changas" como delivery para continuar con el sueño musical. En declaraciones a Todo Noticias, su hermana recordó que "el sábado a la noche sacaron el último tema. Habían invertido mucho dinero para con ese tema poder saltar a la fama".

En redes sociales, se pueden ver parte de las producciones musicales de "Lato". La gran mayoría de sus temas llevan la marca de "Villa Fiorito", su barrio; y de las las motos, su pasión.

La hermana dijo que Lato "hizo de todo para juntar plata para esa moto. Era su sueño, estaba enloquecido con esa moto. No queríamos que viaje. Nos daba miedo que se vaya tan lejos, pero estaba enloquecido. El domingo a la mañana estaba decidido a irse y mi hermano más grande lo acompañó para que no viaje solo. Y lamentablemente pasó lo que no tenía que pasar".

Recordó que, a través de redes sociales, Lautaro realizó compras, pero pequeñas, nunca una moto. "La moto estaba publicada a un precio muy bajo respecto de lo que sale en el mercado. Pero la persona (la vendedora) le decía que necesitaba la plata urgente, por eso la vendía a ese precio. La forma de pago era parte en efectivo y parte en una transferencia bancaria; y una Play Station en forma de pago. Esa era la forma en que se iba a concretar".

Acongojada por lo ocurrido, afirmó: "Era una excelente persona, era un pibe de trabajo. Nos arrebataron la vida, nos arrancaron la vida. Se llevaron una vida. Le dispararon a matar, lo querían ejecutar. Dispararon al auto donde estaba mi hermano mayor que lo acompañó a comprar la moto a Santa Fe. Una vez que cae al piso, no quedaron conformes y lo robaron".

"Si hubiese vivido tampoco iba a poder hacer una vida normal... sabíamos como era nuestro hijo. Nosotros decidimos donar los órganos de para que este sufrimiento no sea en vano y pueda ayudar a alguna otra familia", agregó su padre, quebrado por el llanto.