Un grupo de sacerdotes y monjas presentó este lunes un documento en el que expresó preocupación por el alto nivel de violencia en la ciudad. Los religiosos consideraron que el impacto de la pandemia en la economía y en el funcionamiento de instituciones hizo que "muchos adolescentes y jóvenes sean captados por las bandas" narco. Al mediodía orarán en el cementerio La Piedad, donde según dijeron, se podrán "ver las tumbas de las personas pobres" víctimas de la narcocriminalidad.

Desde la iglesia Buen pastor de Laprida al 2700, el sacerdote Fabián Belay aseveró que "los jóvenes son los más involucrados en situación de muerte" en hechos violentos en Rosario. "Es un problema preocupante. En este tiempo de la pandemia se agudizó muchísimo por el debilitamiento institucional. Muchos adolescentes y jóvenes fueron captados por las bandas", señaló al programa Cada Día (El Tres).

"Para nosotros es un dolor enorme. Concurren a nuestros colegios, a nuestros centros. Son familias devastadas. Nos preocupa porque se agudiza cada vez más. Va a crecer, lamentablemente", consideró.

Belay explicó que en el escrito expusieron que "en el último tiempo desde los tres niveles del Estado se está enfrentando la corrupción". "Mientras el poder no sea juzgado van a seguir siendo juzgado los pobres. Hay todo un sistema financiero, de corrupción, que facilita que esto suceda. A Rosario no la estigmatizan los que venden droga. Son los que generan que sean utilizados para eso", comentó.

Para el religioso, "la cárcel nunca es la solución", ya que en una gran cantidad de investigaciones judiciales quedó expuesto que el narcotráfico es manejado por cabecillas que están presos. "Más que ir a barrios con mano dura, hay que ir a los barrios con desarrollo humano que permita la inclusión de los más vulnerables, sobre todo en niñez, adolescencia y juventud, que quedaron a la deriva", concluyó.

"Venimos pidiendo una política pública que aborde el problema del consumo. Hay que pensar con la pandemia cómo vamos a volver a funcionar y cómo vamos a fortalecer los espacios. Está quedando un panorama bastante duro", aseveró.

Por último, contó que al mediodía irán al cementerio La Piedad a realizar oraciones. "Es desolador ver las tumbas de las personas pobres en ese lugar. Nosotros vamos a pedir por la paz de estas personas que ya partieron y por las familias que quedaron", finalizó.