El posible uso del tradicional edificio de Sarmiento y Córdoba, en el microcentro de Rosario, sigue generando polémica. El debate está centralizado en un destino público o una inversión privada, luego de que Falabella anunciara su inminente retiro de la ciudad.
Al proyecto presentado por el diputado Oscar Martínez sobre utilidad pública o combinada entre los público y lo privada, el concejal de Juntos por el Cambio, Carlos Cardozo, respondió que “el edificio de La Favorita, por unos días más Falabella, tiene en catálogo de patrimonio de la Ciudad protección 1b, casi máxima en envolvente e interior, por lo que no tiene sentido el proyecto de declaración de utilidad pública presentado en la Cámara de Diputados de la provincia por el diputado Oscar Martínez”.
El realidad, el proyecto de "Cachi" Martínez plantea la utilidad pública del emblemático edificio en caso de que no puedan conseguirse inversiones privadas para la explotación comercial del inmueble, o bien en un esquema mixto de actividad pública y privada.
“Por eso una vez más decimos basta de intervención estatal y teniendo este grado de protección edilicia, arquitectónica e histórica, el Estado lo que se debe limitar a hacer es acercar inversores que vuelvan a poner en marcha el centro comercial generando trabajo genuino, no más proyectos delirantes de palacios del empleo público”, apuntó el edil.
“Nos oponemos a toda injerencia de intervención estatal en el proceso virtuoso que debe terminar con el edificio en donde hoy funciona Falabella con la explotación comercial por parte de grupos inversores locales, nacionales o internacionales que garanticen los puestos de trabajo y si es posible los aumenten y terminar con cualquier posibilidad de que pase a ser otro elefante blanco propiedad del Estado”, señaló Cardozo.
Por último, el concejal expresó que “la ciudad ya tiene muchos lugares para la expresión de actividades culturales y sociales, teatros públicos y privados, salas y complejos de cine públicos y privados, espacios de arte públicos y privados y varios de ellos merecen ser puestos en valor, mas aún ante la poca actividad que están teniendo desde hace mas de un año; ahí tienen que ponerse los esfuerzos, no en generar mas lugares que generan mas gasto y mas empleos estatales”.