La vacunación contra el coronavirus abre nuevos debates todos los días. Si alguna vez se cruzaron miradas y consideraciones sobre cierres y aperturas de actividades, síntomas y hasta la misma validez de las vacunas, hace unos meses atrás comenzó a abordarse la posibilidad de un pasaporte sanitario que habilite la circulación y un amplio abanico de actividades a quienes se inocularon, dejando un universo de restricciones a los que rechacen la inoculación.
El miércoles pasado, el presidente de la Unión Industrial (UIA), Daniel Funes de Rioja, consideró que los trabajadores que no hayan recibido al menos una dosis de algunas de las vacunas contra el covid-19 aprobadas en la Argentina no podrán ocupar su puesto de trabajo y, como consecuencia, tampoco cobrarán sus salarios. El planteo, que fue enérgicamente rechazado por el gobierno nacional bajo la premisa de que la vacuna no es obligatoria, despertó la pregunta que late en todo el mundo: ¿pasaporte vacunatorio sí o no?
Aunque algunos países avanzaron, más o menos y con diversidad, en la instrumentación de pasaportes sanitarios para acreditar la vacunación y permitir más actividades para los inmunizados –Israel, Unión Europea, Austria, Dinamarca, Eslovenia, Francia, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Portugal, Japón, entre otros– están los que rechazan la posibilidad, como por ejemplo, Estados Unidos.
En Argentina, también hubo algunos ensayos en este sentido, como en Buenos Aires donde en los establecimientos permitidos, se permite aumentar el aforo un 20% solo para aquellas personas que se hayan aplicado la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus, al menos, 21 días antes; o en en Salta, donde se habilitó la concurrencia a bares de cero a dos de la madrugada para los que estén vacunados. Sin embargo, se trata de estímulos recortados y no pases propiamente dichos.
El 4 de agosto pasado, el gobernador Omar Perotti, anunció que la Provincia implementaría un pasaporte sanitario para algunas actividades una vez que avance con las dos dosis el plan de vacunación contra el coronavirus en Santa Fe. "El que no se vacuna no hará vida social como el resto", sentenció. ¿Qué quedo de esto?
En diálogo con Rosario3, el ministro de ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Juan Manuel Pusineri, consideró sobre la posibilidad de avanzar en un pasaporte santafesino: “El pasaporte vacunatorio está en agenda. Por el momento estamos viendo el proyecto de ley ingresado por el diputado provincial Ricardo Olivera, pero primero, hay que evaluar la temporalidad. Argentina está vacunando. Una vez que concluya la campaña, hay que analizar si existe un porcentaje alto de personas no inoculadas, porque de lo contrario pierde sentido”, indicó.
“Analizamos implementarlo como un esquema recreativo, para eventos, espectáculos, bares y restaurantes, partidos de fútbol. Es decir, no estaría vinculado al ámbito laboral, no será una exigencia para un empleado. Entonces, se piensa para aquellos eventos donde haya un público, que diferencia al que se vacunó del que no se vacunó, quien tiene su derecho a no hacerlo tanto como de la persona que sí lo hizo a participar de una actividad social sin riesgos. Se tiene que entender que la persona que no se vacuna constituye un peligro para los otros”, expresó.
Por otra parte, observó en este sentido: “Nosotros buscamos promover los beneficios de la vacunación, de la necesidad de entender que si todos se vacunan se puede crear una mayor inmunidad contra el virus. Entonces, a aquellos que no opten por vacunarse, no podrán realizar las mismas actividades recreativas que el resto, tendrán restricciones en su vida sociales” dijo y destacó que a través de la app Mi Argentina se podría concretar fácilmente.
Para la ministra de Salud, Sonia Martorano, “hoy la discusión en el mundo es pasaporte vacunatorio sí o no”, y continuó: “Entonces, claro que lo estamos pensando, pero la instrumentación será una decisión que tomará el Ejecutivo cuando tengamos a la mayor cantidad de la población vacunada con las dos dosis. Cuando estemos a fines de agosto y septiembre y lleguemos con los mayores de 18 años con dosis completas, se puede dar esta posibilidad”, destacó.
“Una va imaginando que se van a activar los mega eventos, entonces cuando haya recitales o vuelva el fútbol, podemos ver la posibilidad de un pasaporte. También en bares y restaurantes pero no en el ámbito laboral”, detalló y agregó: “Necesitamos inmunidad, siempre que haya algún reservorio, no vamos a poder a volver a la vida que conocíamos antes de la pandemia. Si no se vacuna África, seguiremos iguales, Estados Unidos lo sabe y por eso las donaciones de vacunas. Considero que hay que focalizar en la solidaridad, motivar a la población a que se vacune desde ahí, desde la importancia de cuidar al otro más allá de las creencias particulares. En ese sentido, no creo que tenga que ser una cuestión punitiva sino un estímulo a garantizar condiciones de seguridad de toda la población”, concluyó.
Consultada al respecto, la médica Sandra Maiorana, representante provincial de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra), opinó de forma personal: “La vacuna no puede ser obligatoria para ir a trabajar porque se trata de una vacuna nueva, pero está el problema sanitario. Creo que para ir a trabajar no me pueden obligar a estar vacunada ahora, dicho esto, para ir a todo lo que es esparcimiento, entrar en un gimnasio, ir a un baile, a un bar a comer donde yo estoy con otra gente y demás, creo que sí”, advirtió.
“Hay lugares en Europa que lo piden para el transporte público, pero si es para entrar a una cancha me parece fantástico, pero no para trabajar porque uno vive del trabajo y la vacuna no es obligatoria. Lo otro no te sustenta y hay una cuestión de salud pública”, finalizó.
Rodrigo Sánchez Almeida, vicepresidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Rosario, sostuvo: “Estoy de acuerdo con un pasaporte, soy un defensor acérrimo de la vacunación”.
Gastronomía
El titular de la Asociación Empresaria Hotelero y Gastronómica de Rosario (Aehgar), Carlos Mellano, volvió a expresarse a favor de la vacunación contra el coronavirus y generar condiciones seguras y confiables para los clientes.
“Nuestra postura es exhortar a la población a que se vacune. A medida que la gente se vacune tendremos menos restricciones. Segundo análisis, el pasaporte. Siempre tenemos cuestiones en tener que ejercer el poder de policía que es una función del Estado. Pero, si habría un mecanismo que garantice que no haya inconveniente y en los horarios que no podemos trabajar la persona pueda ingresar con esta acreditación, lo vemos positivo”, expresó a Rosario3.
“Éste es un marco de incertidumbre permanente, tenemos que ver cómo termina la película. Nuestra postura es positiva, pero esperamos que sea una decisión nacional porque si se aprueba en una provincia y otra hace otra no va. Se tiene que analizar de arriba hacia abajo, en un plan integral”, remarcó.