El ministro de Seguridad Pablo Cococcioni afirmó este miércoles que los atentados cometidos contra la sucursal del banco Macro y el hospital de emergencias Clemente Álvarez fueron una respuesta a las medidas tomadas en las últimas horas con la población carcelaria, pero anticipó que no harán “mover un milímetro” las medidas anunciadas de “restitución de los pabellones de alto perfil para jefes narcos y sicarios”, y el traslado de presos de comisarías a unidades penitenciarias. Además, indicó que asumió con 18 móviles policiales en Rosario y en los días que lleva su gestión pasó a tener 40. “Es una miseria, pero lo vamos a ir aumentando. Vamos a recuperar el control de la calle”, aseguró.
Desde la puerta de la seccional 32ª de barrio Godoy, uno de los edificios que fue vaciado de reclusos en la mañana de este miércoles, Cococcioni expresó: “No vamos a permitir que los criminales nos muevan un milímetro de las decisiones estratégicas. Tengo la firme resolución interna instruyendo para que en el estado de excepción se adopten medidas de alcance de levantamiento de custodias, operativos de cacheo y control en la vía pública, prohibición de elementos a las visitas a complejos penitenciarios, restricción de horarios de visitas, de patio y de comunicaciones”.
“Claramente son reacciones. Me hubiese sorprendido si no había. Esto es porque el régimen penitenciario se configuró como laxo, se debilitaron controles internos y los grupos de requisas”, comentó al ser consultado sobre la posible relación de las balaceras al Macro y al Heca con el movimiento de reclusos que fueron pasados de pabellones comunes a sectores para alto perfil.
Según precisó el funcionario provincial, este miércoles se sacaron los 17 presos que estaban en la comisaría 15ª, los 15 que había en la seccional 12ª de barrio Ludueña, 19 que estaban en la comisaría 32ª y 35 que estaban en la seccional 24ª de Granadero Baigorria. “Son 86 personas que dejarán de estar custodiadas por policías, que pasan a la calle”, señaló al tiempo que añadió: “Vamos a vaciar las comisarías”.
“Se levantaron 30 custodias fijas dispuestas por orden judicial y por orden administrativa interna. Así, se refuerza el proceso de patrullaje preventivo que era muy escaso a nuestro arribo. Hoy tenemos más de 40 móviles, es una miseria. Antes eran 18. Lo vamos a ir aumentando. Vamos a recuperar el control de la calle”, concluyó.
Por su parte, la secretaria de Asuntos Penitenciarios indicó: “Las comisarías van a ser vaciadas en toda la provincia. Empezamos por Rosario por la crisis, pero seguiremos en Santa Fe y en otras localidades”.
El traslado de presos de comisarías a cárceles y la reubicación de reclusos que fueron pasados de pabellones comunes a los de alto perfil se agregan otras determinaciones comunicadas en las últimas horas por el Ejecutivo provincial, como el bloqueo de tareas administrativas por 90 días de la Policía en las seccionales, y la suspensión durante tres meses del uso de licencias por parte del personal de las fuerzas de seguridad provincial.