El secretario de Calidad en Salud del Ministerio de Salud, Arnaldo Medina, evaluó este martes que “es probable” que se tengan que extender las medidas de restricciones dispuestas por el último DNU presidencial ante la segunda ola del coronavirus.
Al ser consultado sobre si las medidas dispuestas por 15 días por el presidente Alberto Fernández se podrían extender en el tiempo, el funcionario de la cartera sanitaria nacional indicó que “es probable, como también es probable que se tengan que tomar nuevamente en el futuro, que se espere un tiempo y se vuelvan a tomar”.
En una entrevista con El Destape Radio, Medina dijo que “habrá que evaluar de acuerdo con los resultados que se obtienen y a la situación epidemiológica”.
El secretario afirmó que hay “una situación de mucha tensión sobre el sistema de salud, y el indicador principal que toma más fuerza es la ocupación de camas, y estamos con una alta ocupación en el AMBA, que es el epicentro de la segunda ola”.
El funcionario dijo que “uno tiene que prever que los casos van a aumentar” y consideró que las medidas en curso, dispuestas por el DNU 241 firmado por el Presidente, buscan “ralentizar la curva, tener menor velocidad de contagios, pero sería de esperar que los casos sigan aumentando, sobre todo ahora cuando vengan los fríos”.
Sobre la campaña nacional de vacunación contra la enfermedad covid-19, indicó que “ya tenemos más de la mitad de mayores de 60 vacunados, y un 70% de mayores de 70 años vacunados”.
“Cuando uno analiza las curvas por grupos etarios se empieza a ver que entre los de más de 70 y 80 la curva tiene un crecimiento menor en los contagios que en los más jóvenes”, precisó en la entrevista según citó Télam.
Clases presenciales
Sobre la disputa entre la Ciudad de Buenos Aires y la Nación en torno a la presencialidad opinó que “cuando se decidió ir a la presencialidad siempre se dijo que se podría volver atrás y que esto dependía del semáforo epidemiológico”.
En este sentido, explicó que “cuando la incidencia de los últimos 14 días es mayor de 150 casos cada 100.000 habitantes ya estamos en riesgo. Y en la Ciudad esta incidencia es de 800, lo que nos habla de un semáforo muy encendido. En el Gran Buenos Aires es un poco más abajo, pero cerca de los 500”.
Al ser consultado sobre la posibilidad de saturación del sistema de salud, manifestó que “si uno toma el AMBA, da un promedio del 75% de ocupación de camas críticas”.
“Ya estamos al borde de una situación más difícil de la que aún tenemos, por eso lo importante de estas medidas, para ganar tiempo y seguir vacunando”, finalizó.