El 40% de los barrios populares de Argentina se encuentran expuestos a por lo menos un factor de riesgo ambiental, como inundaciones o contaminación por presencia de residuos y cercanía con cursos y cuerpos de agua en mal estado. Además, la falta de recursos e infraestructura agrava este panorama.
Esta situación fue estudiada para la elaboración de un informe conjunto de las organizaciones Techo, que se dedica a la construcción de viviendas de emergencia en asentamientos populares, y Jóvenes por el Clima, un movimiento juvenil argentino que forma parte de la iniciativa global por la justicia climática.
El trabajo, titulado "Desigualdad climática en barrios populares: factores de riesgo ambiental en la crisis habitacional de Argentina", destaca que la mitad de los arrabales contemplados están situados en zonas inundables, mientras que el 30% presenta microbasurales, factores que profundizan el impacto de los fenómenos climáticos adversos.
Nicolás Gallardo, referente de Jóvenes por el Clima, remarcó durante la presentación del informe que la falta de políticas para mejorar las condiciones de vida en barrios populares exponen que el Estado se mantiene como un agente meramente "paliativo".
"No se está entendiendo que la política ambiental es para mejorar la vida de la gente", sostuvo el activista.
La falta de infraestructura que impera en estos sectores afecta a entre cuatro y cinco millones de personas que viven en los 6.467 barrios populares del país, dato del Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap), actualizado por última vez en 2023.
Factores de riesgo ambiental
El informe destaca tres factores de riesgo ambiental a los que están expuestos quienes viven en barrios populares: la presencia de cursos de agua, las inundaciones por precipitaciones y los basurales.
El primer factor se halla en zonas con cercanía a un río u otros tipos de cuerpos de agua, que se vuelven un problema cuando hay desbordes o agua contaminada.
En cuanto a las inundaciones, los autores del trabajo apuntaron que, si bien es un factor que se extiende en todas las regiones del país, en los barrios populares sus consecuencias son más severas dado que "la presencia de tierra vacante sobre zonas inundables ha sido progresivamente ocupada por sectores de la población que carecen de tierra y vivienda en búsqueda de un hábitat justo y digno".
También se destaca el dato de que Argentina se encuentra entre los 14 países más afectados por inundaciones, alcanzando pérdidas del 1,1% del Producto Interno Bruto nacional.
Los basurales, en tanto, suelen estar ubicados en predios o en "zonas vacantes aledañas a las viviendas" (microbasurales) y facilitan la propagación de enfermedades, provocando además obstrucciones del espacio.