Kevin Spacey mantuvo una carrera que lo enalteció como figura del cine y las series gracias a sus interpretaciones en papeles de antihéroes enigmáticos, peligrosos y carismáticos, pero una serie de acusaciones por agresiones sexuales provocaron que su figura se fuera a pique y actualmente lo tienen en el banquillo de los acusados en el Reino Unido.
El dos veces ganador del Óscar comenzó haciendo teatro hasta que dio el salto a la pantalla grande, con títulos taquilleros como Belleza americana (1999), Seven (Pecados capitales), Sospechosos habituales (1995) o Superman Returns: El regreso (2006).
Al margen de los hitos de su carrera artística, el actor de 63 años fue una de las primeras estrellas de Hollywood señaladas por el movimiento global #MeToo, nacido en 2017 luego de que trascendieran las acusaciones en contra del productor de cine estadounidense Harvey Weinstein. El actor negó los cargos en su contra, y la situación lo llevó a revelar su homosexualidad.
El juicio contra Kevin Spacey en Reino Unido
El actor estadounidense se presentó ante la justicia inglesa el 28 de junio, en el marco del inicio de un juicio en el que afronta cargos por 12 presuntas agresiones sexuales a cuatro hombres entre 2001 y 2013, acusaciones que el negó "enérgicamente".
El ganador de dos premios de la Academia, galardones que obtuvo por Belleza Americana (1999) y Sospechosos habituales (1995), fue acusado en noviembre por la fiscalía británica de siete agresiones sexuales a un hombre al que habría obligado, entre otras cosas, "a participar en una relación sexual no consentida" entre 2001 y 2004.
Estos cargos se sumaron a su ya pesado expediente: en mayo de 2022 había sido imputado por cinco agresiones sexuales a tres hombres entre 2005 y 2013, cuando era director del prestigioso teatro Old Vic de Londres.
Spacey fue inicialmente acusado en el estado de Massachusetts de haber puesto las manos en los genitales de un muchacho de 18 años en un bar en julio de 2016, pero estos cargos fueron retirados en 2019. En octubre de 2022, la justicia neoyorquina lo absolvió en un proceso civil por tocamientos sexuales al actor Anthony Rapp durante una velada en Manhattan en 1986.
En octubre de 2020 fue condenado a pagar casi 31 millones de dólares a MRC, la empresa productora de House of Cards, como indemnización por la pérdida de ingresos atribuida a su salida de la serie. Un juez de Los Ángeles confirmó esta indemnización en agosto de año pasado.
En una de las audiencias previas al juicio en Londres, el abogado del actor, Patrick Gibbs, aseguró que "Spacey niega enérgicamente cualquier tipo de criminalidad en este caso" y espera poder "defender su inocencia" durante todo el proceso, que podría durar un mes.
En el inicio del juicio, el actor estadounidense fue calificado como un "acosador sexual" por la fiscalía, que también lo definió como "un hombre que no respeta los límites ni el espacio personal", al que "le gusta hacer que otras personas (...) se sientan incómodas". Es "un acosador sexual", afirmó Christine Agnew, representante de la fiscalía.
En una audiencia posterior, uno de los hombres que acusan al actor dijo que la estrella de Hollywood es un "depredador" agresivo que estaba incómodo con su orientación sexual. Contó que Spacey lo agredió varias veces, una de ellas mientras lo llevaba en auto a una fiesta en la década del 2000.
"Me agarró tan fuerte (mis genitales) que casi me salí del carril", explicó. "No aguanto ver a ese hombre. Me hace sentir mal", afirmó el denunciante, que también apuntó que "él estaba claramente muy confundido con su propia sexualidad".
Dada su cooperación con la justicia, el actor está en libertad sin medidas cautelares, lo que le permitió seguir trabajando, aunque su carrera se haya visto duramente resentida por las acusaciones lanzadas en su contra.
Como consecuencia de esta situación, fue despedido de la exitosa serie de Netflix House of Cards, donde interpretaba al protagonista, el maquiavélico presidente estadounidense Frank Underwood. También quedó fuera de una película de Ridley Scott, "Todo el dinero del mundo", en la que fue reemplazado por Christopher Plummer.
"Mi vida va por delante. Nunca me he escondido, no he vivido en una cueva. He ido a restaurantes, he visto a mis amigos, me he reunido con personas que me han defendido y apoyado", declaró Spacey ante la prensa italiana en enero pasado.
Inicios en el teatro y salto a la pantalla grande
Kevin Spacey Fowler nació en Nueva Jersey en 1959 y creció en California, donde asistió durante poco tiempo a una escuela militar de la que fue expulsado. Al recordar su infancia, el actor se refirió a su padre como un "supremacista blanco" y un "neo-Nazi" que despreciaba a los homosexuales y no valoraba el interés de su hijo por el teatro.
Sin embargo, eso no le impidió al actor matricularse en Juilliard en 1979, cuando ingresó en la prestigiosa escuela de arte de Nueva York. Su mayor éxito en esos primeros años de teatro vino en 1986 gracias a su participación en "Long Day's Journey Into Night", en la cual compartió escenario con Jack Lemmon.
Su primer rol en una película llegó ese mismo año con Se acabó el pastel, protagonizada por Jack Nicholson y Meryl Streep. Spacey interpretó a un ladrón en el metro en la producción dirigida por Mike Nichols, con quien volvería a trabajar en 1988 en Armas de mujer.
En 1995 interpretó al asesino en serie de Seven, y obtuvo su primer Óscar como mejor actor de reparto en Sospechosos habituales.
La consagración de Spacey llegó en 1999 con Belleza americana, en la que encarna a un padre de mediana edad que enloquece por una adolescente. Su segundo Óscar como mejor actor le llegó gracias a esa cinta, que también se llevó cinco premios de la Academia, incluyendo el de mejor película.
En 2006 también cosechó aplausos en la pantalla grande por su papel como el villano Lex Luthor en Superman Returns: El regreso. Y algunos años después, en 2013, contribuyó a la revolución del streaming en Hollywood al tomar el protagónico de la primera gran serie de Netflix, House of Cards, en la interpretaba a un diputado ambicioso y sin escrúpulos que llegaría a la Casa Blanca.
Fue la primera serie exclusivamente en línea nominada y ganadora de un Emmy, y marcó además el comienzo de la era del maratón de series.
Acusaciones del #MeToo y caía de su imagen pública
La reputación de Spacey comenzó a desmoronarse en octubre de 2017. Apenas tres semanas después de que las acusaciones contra el productor Harvey Weinstein salieran a la luz pública, el actor fue apuntado por el movimiento #MeToo cuando el actor Anthony Rapp lo acusó de haberlo agredido sexualmente a los 14 años.
Aunque Spacey se disculpó rápidamente, fue igualmente criticado por intentar desviar la atención de la noticia confirmando que es gay, algo que ya era un secreto a voces en Hollywood desde hacía años.
En menos de un mes, Spacey fue acusado de abuso sexual por varios hombres en Estados Unidos y el Reino Unido, expulsado por Netflix y, sorprendentemente, retirado a última hora de la película Todo el dinero del mundo.