Barrio Azcuénaga aún está en shock por la muerte de Patricio Gigena, el jubilado mecánico brutalmente asaltado en su taller. Le habían pegado un palazo en la cabeza oara robarle el martes pasado y falleció este domingo. Su hijo Walter, con quien trabajaba en el taller de Montevideo y Solís, recordó aquel fatídico día y dijo que pedirán la pena máxima para los dos imputados, una pareja de limpiavidrios que fue detenida poco después del robo a don Patricio.
“Estamos todos destruidos, no caemos todavia, no entendemos la saña, por qué tanta malicia, no se explicarlo”, dijo Walter en contacto con el programa De boca en boca (Radio 2).
Walter trabajaba con su papá en el taller y ya habían sido víctimas de inseguridad, tanto que hace unos años pensaron en cerrar.
Sobre los detenidos, Walter aseguró que quieren la pena máxima. Contó que no son desconocidos para los vecinos quienes durante el velorio de don Patricia recordaron cómo estas dos personas tocaban timbre, casa por casa, con el pretexto de pedir agua, pero para entrar a robar.
En el taller, con las puertas abiertas, Don Patricio fue un blanco fácil.
Este lunes a las 19.30 vecinos, amigos y familiares de los Gigena se movilizarán en la esquina de Montevideo y Solís para pedir Justicia.