El abogado Rodrigo Mazzuchini, defensor del ex jefe de la seccional 7ª acusado por la muerte de Franco Casco ocurrida en octubre de 2014, aseguró que el joven "murió ahogado", según la información de sus peritos de parte. Agregó que en esa comisaría donde estuvo demorado "no pasó nada" –la teoría del caso señala que allí fue torturado– y que la prueba científica estaría "a favor" de los policías procesados en la causa.
"A nivel jurídico, la prueba científica está a favor nuestra. La autopsia da causa de muerte indeterminada. No hay una sola radiografía de Franco Casco golpeado, huesos rotos. La acusación dice que murió bajo tortura y no tiene un solo hueso roto", dijo Mazzuchini en Cada Día (El Tres).
El abogado agregó que según sus peritos de parte, "murió ahogado" el joven de Florencio Varela. "De ninguna manera por una tortura como quieren instalar que pasó en la comisaría 7", añadió el defensor particular del ex comisario Diego Álvarez.
Además, explicó que Casco fue aprehendido porque un vecino de barrio Luis Agote "vio algo sospechoso, se comunicó al fijo de la comisaría y como no lo atendían, llamó al celular del comisario. Álvarez (comisario) le daba el celular a los comerciantes de la zona y vecinos".
"Cuando lo quieren identificar, le tira un ladrillazo al móvil. Ahí lo detienen y lo llevan. Se labran las actuaciones y se lo llama al fiscal Campos que hoy es juez. Se pidieron los antecedentes y se le dio la libertad", comentó.
Para Mazzuchini, "en la comisaría no pasó nada". Cabe destacar que según la acusación, fue en esa seccional donde Casco habría sufrido golpes previos a ser encontrado muerto en el río Paraná.
El juicio comenzó este lunes ante el Tribunal Oral Federal Nº 2 de Rosario, integrado por los jueces Otmar Paulucci, Eugenio Martínez y Ricardo Vázquez. En la previa, hubo movilización de la Multisectorial contra la Violencia Institucional, y también de familiares de los policías que llegan al debate oral y público.
Los acusados
En total son 19 los acusados, de los cuales 17 son policías de la comisaría 17ª.
Los agentes Diego Álvarez –jefe de la secional–, Cecilia Contino, Walter Benítez y Fernando Blanco están procesados por desaparición forzada seguida de muerte y por la aplicación de torturas.
Los policías Rocío Hernández, Marcelo Guerrero, Enrique Gianola Rocha, César Acosta, Guillermo Gysel, Cintia Greiner y Esteban Silva se encuentran procesados por desaparición forzada seguida de muerte.
En tanto, los agentes Rodolfo Murúa, Walter Ortiz, Romina Díaz, Ramón Juárez, Elisabeth Belkis y Franco Zorzoli, llegan al juicio acusados por participación secundaria en la desaparición forzada seguida de muerte.
Por último, Pablo Síscaro y Daniel Escobar, de la Dirección de Asuntos Internos, son enjuiciados por el delito de encubrimiento.