El gobernador Maximiliano Pullaro aseguró este jueves que los inhibidores de señal instalados en la Unidad Penitenciaria Nº 11 por la gestión anterior no tienen “precisión determinada” y que gran parte de los aparatos estaban apagados. Las declaraciones del mandatario provincial se dieron en la previa de un encuentro con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, al que asistió junto con el intendente de Rosario, Pablo Javkin.
En julio de 2023, la gestión de Omar Perotti puso en funcionamiento, después de un largo proceso licitatorio, el sistema de inhibición de señal en la Unidad Penitenciaria Nº 11. Sin embargo, esta herramienta no estuvo a la altura de lo anunciado. Por caso, la Fiscalía tiene la hipótesis de que la orden de balear el banco Macro de Ovidio Lagos y Saavedra y el Heca partieron desde la cárcel de Piñero.
Ya a mediados de noviembre, el ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, había dicho en Radio 2 que los inhibidores “se prenden y apagan intermitentemente, con lo cual si el preso manda un mensaje, no sale inmediatamente, pero espera un rato y sale”.
Pullaro ratificó este diagnóstico hoy: “Los inhibidores son una tecnología que no tiene una precisión determinada. Gran parte estaban apagados y al estar apagados los celulares funcionaban de manera correcta”.
Además, según trascendió, en la reunión prevista para la tarde, Pullaro le solicitará a Bullrich la creación de un comando operativo conjunto que él mismo pretender liderar para combatir el delito organizado.
“Eso nos va a permitir saber qué es lo que hace cada uno de los hombres de las fuerzas federales en el territorio”, expresó Pullaro, que invocó la ley de Seguridad Interior para justificar el pedido en un “contexto de emergencia” de seguridad pública.