Como resultado del operativo de intensificación de fiscalizaciones viales en límites interprovinciales, con la obligatoriedad de un hisopado negativo de coronavirus, 52.539 vehículos fueron controlados y 253 rechazados en la última semana y no pudieron ingresar a Santa Fe.
Quienes debieron retornar a su lugar de origen fue por no contar con la documentación exigible, el test de covid-19 de no más de tres días de antigüedad o dieron positivo en el de anosmia (olfato).
“A partir del decreto 647/20 del gobernador Omar Perotti, el balance de esta primera semana de vigencia arrojó 52.539 fiscalizaciones y 24.000 test de anosmia realizados, así como 253 vehículos rechazados para ingresar a territorio santafesino”, detalló el titular de la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV), Osvaldo Aymo.
Y sumó: “Si tomamos el 8 de julio como fecha de inicio del refuerzo de controles, podemos decir que, de la previa de ese fin de semana largo hasta el domingo 2 de agosto, 1.230 vehículos debieron retornar a su lugar de origen desde alguno de los 27 puestos de control que tenemos en todos los límites que nos separan de las provincias vecinas”.
En paralelo, el funcionario remarcó que “se han establecido 27 puestos de control vial a lo largo y a lo ancho de toda la provincia de Santa Fe desde el inicio de la cuarentena, y de acuerdo a nuestras cifras, este fin de semana que pasó llegando a un millón de vehículos fiscalizados”.
Para cerrar, explicó que el mayor flujo vehicular se produce en los puntos en que el gobierno de la provincia desarrolla el plan Accesos Cuidados, emplazados en el peaje General Lagos (autopista Rosario-Buenos Aires); Túnel Subfluvial (ingreso por Entre Ríos desde Paraná), ruta nacional 11 (altura Florencia, límite con Chaco), y ruta nacional 19 (localidad de Frontera, límite con Córdoba).