Empresarios del transporte interurbano de pasajeros que prestan servicios en la región se declararon en crisis. Reclaman un aumento de tarifa del 60 por ciento pero entienden que semejante actualización no se resolverá hasta el cambio de gobierno en menos de diez días. Por eso, "para que la situación no sea terminal", anuncieron un recorte de servicios desde el lunes. Según sostienen, el desfase entre los costos y el boleto es cercano al 100 por ciento, lo que hace inviable el sostenimiento del sistema.
"Lo que vamos a hacer es retirar desde el lunes los servicios que no sean rentables, que principalmente son los recorridos nocturnos y algunos durante el día”, anunció en Cada Día (El Tres) el referente del sector, Saúl Isaacson.
“Estamos en una situación grave. Por eso solicitamos al gobierno provincial un aumento tarifario desde la primera devaluación de septiembre, que nos golpeó muy fuerte. Pero por los procesos eleccionarios esto se fue posponiendo”, detalló.
Esa demora en la actualización ahora se extendió por la transición del gobierno provincial y los empresarios entienden que no se va a resolver hasta el inicio de la nueva gestión. “Lo que pedimos es un 60 por ciento de actualización, que es lo mínimo que necesitamos para cubrir costos”, agregó.
Si bien reconoció que la medida no representará una solución de fondo, el empresario del transporte interurbano explicó que el objetivo es “guardar fuerzas hasta el recambio”. “La realidad es que nos está pasando algo que no nos pasó nunca y es que nos está costando pagar las facturas de gasoil”, concluyó.