Cientos de personas se movilizaron este viernes en la capital formoseña para protestar por la vuelta a Fase 1 de aislamiento, a la que decidió regresar el gobierno local producto de lo que consideraron un rebrote de casos de coronavirus. La policía reprimió con balas de gomas y gases lacrimógenos.
La ciudad determinó regresar a la etapa más estricta del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio desde las 0 del jueves hasta el 18 de marzo, tras detectarse 17 casos de coronavirus.
La decisión implicaba el cierre nuevamente de los locales comerciales que no sean esenciales. El transporte interjurisdiccional también quedó suspendido, mientras que el urbano quedará a criterio de la Municipalidad de la ciudad que resolverá qué medidas tomar.
Este jueves se hizo público la decisión a través del parte informativo del Consejo de Atención Integral de la Emergencia COVID-19 de la provincia. “Lo que estamos viendo hoy es una foto de lo que pasó 14 días atrás, no es lo de ayer, es lo que viene ocurriendo en transmisión y contagios de días atrás”, afirmaron.
Los principales reclamos fueron llevados a cabo por comerciantes y trabajadores ambulantes, que piden trabajar sin restricciones. Al grito de “queremos trabajar”, decenas de personas marcharon hacia la Casa de Gobierno provincial.
Los manifestantes arrojaron huevos contra el edificio y en un momento, cuando intentaron sortear el vallado de seguridad dispuesto en el lugar, se enfrentaron con efectivos policiales, que arrojaron balas de goma y gases lacrimógenos.
“Gildo (Insfrán) hace lo que quiere con Formosa, somos comerciantes no tenemos sueldos fijos, no vivimos del Estado, no tenemos planes, si no vendemos no tenemos plata y no tenemos alimentos. Queremos abrir con protocolo, todos nos cuidamos”, dijo una manifestante.