Matías Ezequiel Martínez, el policía que fue detenido por el femicidio de Úrsula Bahillo en la ciudad bonaerense de Rojas, se declaró culpable en otra causa que enfrenta por violencia de género y acordó con la fiscalía una condena a cuatro años de prisión efectiva.
El agente se declaró culpable por amenazas y lesiones a una de sus exparejas, Belén Miranda, en medio del proceso por el asesinato a puñaladas de la joven de 18 años.
Martínez admitió en los tribunales el hecho y su defensa aceptó la pena solicitada por la fiscal Fernanda Sánchez, quien había pedido una condena a cuatro años por "lesiones leves calificadas y amenazas calificadas" contra la víctima.
El tribunal deberá formalizar la condena a cuatro años de prisión en los próximos días.
En su testimonio ante el tribunal, la joven narró cómo fue la relación violenta a la que fue sometida por Martínez y denunció que el agente fue "protegido" por sus colegas de la fuerza. Incluso recordó cuando su expareja la golpeó y la amenazó de muerte con un arma de fuego.
Los mensajes de la víctima
"Llegó el día más esperado, tengo los sentimientos encontrados, quiero verlo y ver si tiene el valor para mirarme a la cara el hdmp, no hay que odiar ni desearle la muerte a nadie, pero a él lo odio y deseo que se muera, pero que sufra mucho y pague por los daños que causó", escribió Miranda en Twitter antes de concurrir a los tribunales.
En otro de sus mensajes, afirmó que "ojalá se pudra en la cárcel por basura y haberle cagado la vida a tantos, te vas a MORIR ahi adentró MATÍAS MARTÍNEZ".