FaceApp se hizo popular el año pasado, se convirtió en la app del momento y fue la más bajada en la Argentina y en más de cincuenta países. Su primer hit fue la función de envejecer los rostros. Ahora, volvió al ruedo con la posibilidad de cambiar de género: caras masculinas se transforman en las típicamente femeninas y viceversa. 

La aplicación fue creada por el ruso Yaroslav Goncharov y emplea redes neuronales para escanear caras y hacerlas más viejas, jóvenes, agregarles distintos tipos de barbas o cambiarles el género, entre otras opciones. Sin embargo, el año pasado se encendieron las alarmas. ¿Cuáles son sus peligros?.

Para los defensores de la privacidad, con estas acciones se le otorga demasiada información a la empresa sin saber qué harán con ella. El comentarista de tecnología Stilgherrian sugirió el año pasado al diario ABC.au: "Todo este modelo de negocios está recogiendo cantidades masivas de datos personales sin ninguna idea de cómo podría ser utilizado en el futuro".

Esta semana, según publicó LaNación, la atención está puesta en su política de privacidad actualizada el 6 de junio. En ella, los usuarios aceptan que el sistema registre el IP del dispositivo y a qué página ingresaron antes de usar su sistema. Fernando Suárez, presidente del Consejo General de Colegios de Ingeniería Informática de España dijo al diario El País que ceder estos datos a ciegas es como "vender el alma al diablo".

El servicio también quedó expuesto a acusaciones de racismo cuando se comprobó que uno de sus filtros blanqueaba la piel de usuarios de color con el supuesto objetivo de volverlas más atractivas. En su momento, Goncharov pidió disculpas por la situación y retiró las herramientas bajo cuestionamiento.

Licencia a perpetuidad

Al acceder al sitio web de FaceApp o al descargar la aplicación móvil cada usuario ya está aceptando los términos y condiciones. De hecho, accede a una 'disposición de arbitraje' obligatoria y renuncia a tomar un tipo de demanda de acción de clase.

Abiertamente, le piden que si no está aceptando estas condiciones, incluyendo el uso y modificación del contenido en la posterioridad, no acceda ni use los servicios.

Aunque FaceApp dijo en hace algunos meses en un comunicado  que no es necesario un registro y que un 99% de los usuarios no se registran en su sitio, extraña la contradicción con sus condiciones de servicio, que señalan que los usuarios necesitan "utilizar sus credenciales (por ejemplo, nombre de usuario y contraseña) de una plataforma en línea de terceros para acceder".

Un usuario de Twitter probó la app en rostros famosos: