El presidente electo de los Estados Unidos, Joe Biden, asumirá oficialmente su cargo este miércoles en las escalinatas del Capitolio a las 13.30 hora argentina, en un acto para el que el centro de la ciudad de Washington se convirtió en una fortaleza vallada con alambre de púas y rodeada por 25.000 soldados de la Guardia Nacional.
El Servicio Secreto estableció un mapa de seguridad en el cual delimitó una llamada "Zona Verde", un área restringida que se extiende desde dos cuadras al este del Capitolio hasta el río Potomac al oeste del Monumento Lincoln.
Los últimos actos de asunción presidencial en los Estados Unidos llegaron a convocar a más de un millón de personas en la Explanada Nacional, desde donde la ceremonia se podía ver en pantallas gigantes y también el desfile del presidente desde el Capitolio hasta la Casa Blanca, pero para esta ocasión el evento será distinto.
La pandemia de coronavirus y, sobre todo, el asalto al Capitolio del 6 de enero protagonizado por partidarios del presidente saliente Donald Trump, generan un clima de tensión que impedirá la movilización de la gente hacia el lugar.
Unos 25.000 efectivos de la Guardia Nacional, miles de policías y agentes de varias fuerzas de seguridad serán desplegados en Washington durante la ceremonia de asunción presidencial, y la preocupación es tal que el FBI investiga incluso a cada uno de los miembros de la Guardia Nacional.
El secretario del Ejército Ryan McCarthy dijo el domingo que las autoridades están conscientes de las posibles amenazas y advirtió a los comandantes que estén alertas ante cualquier problema al interior de sus filas a medida que se acerca el cambio de poder. No obstante, las autoridades señalaron que hasta el momento no ha aflorado ninguna situación irregular.
Según consignó The Washington Post, el FBI ha advertido a las fuerzas de seguridad que algunos extremistas de ultraderecha plenean hacerse pasar por miembros de la Guardia Nacional mientras que otros han revisado los mapas de los puntos vulnerables de la ciudad.
El acto de asunción
El traspado de mando, según indica la Constitución de Estados Unidos, debe concretarse el 20 de enero mediante el recibimiento del nuevo mandatario en la Casa Blanca por parte del presidente saliente, para partir todos juntos a la ceremonia.
Sin embargo, está previsto que Trump abandone temprano la mansión presidencial junto con su esposa Melania ya que decidió irse a su casa en Florida sin cruzarse con los Biden, siendo así la primera vez en 152 años que un presidente no va a la asunción de su sucesor.
La jura será al mediodía en las escalinatas del Capitolio y el acceso de funcionarios y periodistas estará limitado al extremo, ya que habrá solo cerca de 1.000 invitados ubicados con distancia social.
La cantante Lady Gaga, a quien Biden considera una "gran amiga", interpretará el himno nacional y luego habrá un número musical a cargo de Jennifer López.
Biden y su esposa transitarán parte de la avenida Pennsylvania en la llamada Escolta Presidencial, desde la calle 15 hasta la Casa Blanca, donde serán acompañados por varias fuerzas militares que tocarán sus instrumentos. Este desfile, que suele concretarse entre miles de simpatizantes que saludan al nuevo mandatario, se hará esta vez casi en soledad.