Este viernes al mediodía, la barriada Los Pumitas de Empalme Graneros se mudó al centro de Rosario para visibilizar su dolor por la muerte de Máximo Jeréz, el chico de 11 años asesinado por las balas del nercotráfico, y también para pedir por "no más muertes" y por "paz" para la ciudad. En un sentido inclusivo y en contra de la discriminación que sufren, los familiares del chiquito fallecido hablaron en castellano y en qom en el punto cúlmine de la movilización.
Fue muy conmovedor observar cómo se movilizaron los familiares de Máximo, pero sobre todo cómo lo hicieron sus amiguitos del barrio y sus compañeros del club Los Pumitas, con los que compartía las tardes jugando al fútbol y soñando a lo grande.
"Estamos acá para visibilizar nuestro dolor, pero también para hablarle a todo el pueblo de Rosario porque no queremos más muertes", expresó una de las tías de Maxi. Luego habló en qom y terminó su alocución con una plegaria mezclada con un llanto estremecedor, mientras toda la plaza la escuchaba en silencio.
A continuación, en vivo en De 12 a 14 (El Tres), habló Julio, el papá de Máximo, quien también pidió por "justicia" y para "que el barrio recupere su normalidad y la gente pueda andar tranquila por la calle y sin miedo".
En la marcha de este viernes, los familiares de Maxi y los vecinos de Empalme fueron acompañados por diversas organizaciones sociales y barriales, por gremios y por docentes y militantes de la ciudad.