El represor Luis Muiña, condenado a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad en la última dictadura militar, contrajo coronavirus y está aislado y en tratamiento en un sector especial dentro del hospital Muñiz.
Según confirmaron a Télam fuentes del Servicio Penitenciario Federal, Muiña está "aislado y en tratamiento" tras dar positivo para covid-19 en su lugar de detención, el penal de Campo de Mayo.
El represor está incluido en los llamados "grupos de riesgo" por patologías previas y había sido trasladado para un tratamiento médico a un centro asistencial fuera del penal.
De acuerdo a lo publicado por Página 12, Muiña había estado casi dos semanas internado en el hospital Raúl Larcade, de San Miguel, entre el 4 y el 17 de junio. "Desde el penal informaron antes de salir al control en el hospital de San Miguel, no tenía síntomas. Que cuando regresó, tampoco los tenía, pero quedó en aislamiento preventivo mientras le hacían los análisis de coronavirus", reprodujo el abogado Pablo Llonto, que representa a querellantes en causas contra el represor.
Muiña fue condenado a prisión perpetua por el homicidio agravado del médico Jorge Roitman, a fines de 1976 en el centro clandestino de detención que funcionó en el hospital Posadas, en la localidad bonaerense de El Palomar.
La condena fue confirmada por la Cámara Federal de Casación Penal durante el aislamiento social preventivo y obligatorio por la pandemia.
Integró el autodenominado grupo "Swat" responsable del asesinato de Roitman, entre otros hechos, que funcionaba en una casa llamada "El Chalet" dentro del predio del hospital.