El gobierno nacional investiga las causas del apagón del domingo que afectó a casi todo el país de forma inédita y según los primeros indicios hubo al menos cuatro fallas simultáneas en el funcionamiento del sistema eléctrico.
Esa combinación de errores habría generado la interrupción masiva del servicio y además retrasó su solución. Dos procesos afectaron por la mañana al sistema eléctrico y desataron los errores que condujeron al corte y otros dos complicaron la vuelta a la normalidad de la operatoria, según informó Clarín.
La primera falla ocurrió en un tramo de una línea de transmisión eléctrica y debió cerrarse automáticamente para evitar el apagón del sistema, pero no funcionó. Como alternativa a esa falla, había una segunda línea, pero estaba inhabilitada por una reparación que estaba haciendo Transener.
Una vez que se apagó la electricidad en el país, la administradora Cammesa intentó rehabilitar la generación en tramos y pidió a centrales eléctricas que se conectaran al sistema de alta tensión. Pero la energía que debía llegar de El Chocón (en Neuquén) y Embalse (Córdoba) llegó tarde o con "obstáculos", según explicaron fuentes oficiales a Clarín.
En el corredor Litoral, hubo un problema en el tramo Colonia-Elía/Mercedes pero se apagó esa línea (técnicamente se llama "recierre"). Pero la anomalía se repitió. "En pocos segundos se produce otro recierre de características similares en el tramo que sigue de línea, Colonia Elía-Campana, cuyo recierre no fue exitoso", explicó Carlos García Pereira, director general de Transener.
El "recierre" no exitoso significa que un tramo que debió haber quedado inhabilitado automáticamente, siguió activo. Y eso causó el "despeje" de línea, que implica el apagado del sistema de alta tensión. Es la primera falla que los investigadores deberán poner bajo la lupa.
Pero inmediatamente ese tropiezo se encadenó con la siguiente falla y se sumó a un tramo de una línea que estaba fuera de servicio porque se está haciendo una obra. En el sistema fallaron tanto el plan "A" como el plan "B" de una línea. De haber funcionado alguno, es probable que el colapso eléctrico se hubiese evitado, siempre según el informe de Clarín.
Transener colocó un "bypass" -un conducto que uniera los puntos fuera de funcionamiento-. "Si no hubiera estado el bypass, la contingencia (el desequilibrio) hubiera sido mucho menor y quizás se hubiera resuelto de manera más simple", admitieron.
Mantener el sistema eléctrico cuesta 9.500 millones de dólares anuales. Una concatenación de errores provocó un apagón que terminó siendo breve en duración, pero el mayor en términos geográficos.