La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó que uno de cada cuatro centros de atención médica en el mundo carece de suministro de agua, lo que expone a los trabajadores sanitarios y pacientes a un mayor riesgo de infección por coronavirus.
Son alrededor de 1.800 millones las personas que se atienden o trabajan en locales sanitarios que no cuentan son servicios básicos de agua, según advirtieron en un informe conjunto la OMS y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) tras recolectar datos de 165 países.
"Trabajar en un establecimiento de salud sin agua, saneamiento e higiene es casi como enviar enfermeras y médicos a trabajar sin equipo de protección individual", indicó el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Según la OMS, la proporción de profesionales sanitarios infectados por covid-19 es mucho mayor en estos lugares, ya que si bien representan menos del 3% de la población, la cifra escala hasta el 14% cuando se refiere a los casos de contagio constatados en todo el mundo.
Es por eso que Tedros recordó que "el suministro de agua, el saneamiento y la higiene en los centros de salud son esenciales para contener el covid-19".
"Enviar a profesionales sanitarios y personas que necesitan tratamiento a centros sin agua limpia, sanitarios seguros o inclusive jabón, pone en riesgo su vida", afirmó por su parte la directora general de Unicef, Henrietta Fore.
El informe revela que uno de cada cuatro centros de salud en el mundo no cuenta con suministro de agua, uno de cada tres no ofrece una higiene de manos en los lugares de atención, y uno de cada diez no tiene acceso al saneamiento, así como uno de cada tres no clasifica sus desechos de manera eficaz.
La situación se vuelve peor aún en los 47 países menos adelantados del planeta: uno de cada dos centros de salud no cuenta con servicios básicos de agua potable, uno de cada cuatro no tiene donde lavarse las manos en los propios sitios en que se brinda la atención médica, y tres de cada cinco no tienen acceso a los servicios básicos de saneamiento.
La OMS y la Unicef calculan que el costo de instalar servicios de suministro de agua en establecimientos sanitarios en los 47 países menos avanzados sería de 1 dólar per cápita, mientras que el promedio para hacer funcionar y el mantenimiento de estos servicios requeriría 0,20 dólar por habitante al año.