El duodécimo vuelo de Aerolíneas Argentinas destinado al transporte de vacunas desde Rusia llegó este lunes al atardecer al país con 800 mil dosis de Sputnik V, con las cuales el país contará con casi 9 millones de dosis para el combate de la pandemia del coronavirus.
La aeronave Airbus 330-200, matrícula LV-GIF con el número AR1061, aterrizó en el aeropuerto internacional de Ezeiza a las 19.39, luego de realizar esta mañana una escala técnica en Roma, debido al volumen y peso de la carga.
La ministra de Salud, Carla Vizzotti, remarcó que se distribuirán las dosis “a las jurisdicciones lo antes posible para acelerar este proceso de vacunación, fundamentalmente, a las personas mayores de 60 años”.
“En Argentina ya se ha vacunado con una dosis el 70% de las personas mayores de 70 años. Nuestro objetivo es disminuir la mortalidad”, agregó.
Por su parte, el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, subrayó que “esta es la única prioridad que tiene el gobierno, está la decisión del Presidente de dedicar todos los esfuerzos a lo único que es importante, que lleguen vacunas, que haya camas, que haya respiradores, que podamos seguir cuidando la salud de cada argentino y de cada Argentina no nos vamos a distraer un solo segundo en otra prioridad”.
Con las 864 mil dosis de AstraZeneca que llegaron este domingo, se completarán 1.664.000 dosis recibidas en las últimas 30 horas, para totalizar 8.929.745 de vacunas hasta el momento.
El vuelo, el 12° a Rusia para traer vacunas, había aterrizado el sábado a las 17.53 (hora argentina, 23.53 de Moscú), tras haber despegado del aeropuerto internacional de Ezeiza a las 2.08 de la madrugada de ese mismo día y debió permanecer en suelo moscovita debido a una demora en la logística de la carga.
La tripulación de 20 personas, compuesta por cuatro comandantes, seis copilotos, personal técnico, de mantenimiento y tripulantes de cabina, permaneció en un hotel del mismo aeropuerto a la espera del proceso de carga que concluyó esta madrugada.
La vacuna de Sputnik-V viaja en contenedores especiales denominados "Thermobox", los cuales necesitan estar refrigerados mediante el sistema termogel y hielo seco para mantener la temperatura a 18 grados bajo cero.