Los contagios de coronavirus en Rosario crecen día a día –este jueves, se rompió nuevamente el récord de infecciones, con 234 casos en una sola jornada– y por eso desde la Municipalidad decidieron “poner a punto” los centros de aislamiento de la ex Rural y el Hipódromo que hasta ahora no recibieron demasiados pacientes. La idea es que esté preparado para recibir enfermos leves.
En contacto con el programa A diario (El Tres), el secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana, señaló que actualmente “se trabaja en la puesta a punto del centro de aislamiento” porque a corto plazo” podrían necesitar las camas para pacientes con síntomas leves.
Caruana recordó que se habilitó su uso para los brigadistas que combaten los fuegos en el delta del río Paraná, y también, durante lo más crudo del invierno, para las personas en situación de calle.
Sólo en julio recibió a un grupo grande de personas con sospechas de covid: unos 60 hombres y mujeres que tuvieron contacto con un infectado en situación de calle que habría llegado a la ciudad en bicicleta desde Buenos Aires.
“Hoy el criterio es (alojar) casos confirmados leves, sin necesidad de atención médica”, precisó y aclaró que se habilitará únicamente para aquellas personas que por si situación particular no puedan guardar el debido aislamiento en sus domicilios o se encuentren en situación de calle.
Agregó que si se requiere de un cuidado mayor, el contagiado será tratado en un hospital público o privado.
En Rosario funcionan dos centros de aislamiento: además del de la ex Rural, otro en el Hipódromo, con una capacidad total de 1.200 camas. Se armaron con aportes del gobierno provincial y se inauguraron en abril pasado pero se usaron poco. Al menos, para lo que fueron montados.