La farmacéutica Moderna anunció que lleva adelante una investigación del lote de 1,2 millones de dosis contra el coronavirus para determinar si se justifica una pausa en su uso, tras registrarse varias reacciones alérgicas en el estado de California en Estados Unidos.
"Moderna reconoce haber recibido un informe del Departamento de Salud Pública de California (CDPH) de que varias personas en un centro de vacunación en San Diego fueron tratadas por posibles reacciones alérgicas después de la vacunación", informó la compañía a través de un comunicado.
El texto publicado en su página web establece que la compañía trabaja a la par con las autoridades de California y la Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) y afirma que desconoce "otros eventos adversos en otros centros de vacunación".
En concreto, el lote número 041L20A contenía 1.272.200 dosis, de las cuales casi un millón de dosis (964,900) fueron distribuidas en aproximadamente 1.700 sitios de vacunación en 37 estados, indicó la farmacéutica.
"Según CDPH, eso incluye más de 330,000 dosis de este lote distribuidas a 287 proveedores en todo el estado de California. Un total de 307,300 dosis permanecen almacenadas y aún no distribuidas", detalló el comunicado de Moderna.
California informó el domingo pasado que menos de 10 personas a las que se les administró el fármaco en una clínica en San Diego tuvieron que recibir atención médica en un lapso posterior a las 24 horas. Asimismo, las autoridades expresaron que no tenía conocimiento sobre reacciones alérgicas similares en ninguno de los otros 286 sitios de vacunación.
"Por precaución extrema y reconociendo también el suministro extremadamente limitado de vacunas, estamos recomendando que los proveedores utilicen otro inventario disponible", manifestó en el comunicado Erica Pan, epidemióloga estatal de California, citada por la cadena de noticias CNN, según publicó Télam.