El Parlamento de Austria aprobó ampliar otros diez días el confinamiento a nivel nacional en un intento por reducir los contagios de coronavirus a pocas semanas de Navidad.
Si bien los casos diarios han disminuido desde que el Gobierno decidió implementar nuevas medidas de restricción, la tasa de hospitalización sigue aumentando en el país, donde las autoridades han anunciado que se impondrán multas de hasta 7.200 euros para aquellas personas que no se hayan vacunado a partir de febrero de 2022.
Los diputados del gubernamental Partido Popular Austriaco (OVP) y los Verdes, con el apoyo del Partido de la Libertad (FPO), sacaron adelante una moción y aprobaron prorrogar la cuarentena en todo el país, informó la agencia de noticias DPA.
El Parlamento aprobó además un cambio en los horarios de apertura de las tiendas, que tendrán que cerrar sus puertas a las 19 a partir de mañana. Hasta ahora, era posible mantener estos comercios abiertos hasta las 21.
El confinamiento en Austria rige desde el 22 de noviembre y obliga a cerrar a comercios, restaurantes, mercados navideños, salas de concierto y peluquerías, aunque las escuelas siguen abiertas. Como en etapas de cierres anteriores, los 8,9 millones de austríacos, en teoría, tienen prohibido salir de su casa salvo para hacer compras, practicar deporte o recibir atención médica.
También se permite ir a la oficina y llevar niños a la escuela, pero las autoridades llamaron a la población a permanecer en casa y optar, en la medida de lo posible, por el teletrabajo.
El Gobierno se comprometió, no obstante, a levantar las medidas de restricción el próximo 12 de diciembre para aquellos que estén vacunados o se hayan recuperado recientemente de la enfermedad provocada por el virus. De forma paralela, las autoridades siguen estudiando las posibilidades legales de imponer la vacunación el próximo año.
Autoridades sanitarias informaron que, durante la última semana, la tasa de incidencia se situó en torno a los 900 casos por cada 100.000 habitantes, una cifra inferior a los 1.100 registrados la semana anterior.
No obstante, actualmente hay 642 pacientes en las unidades de cuidados intensivos de todo el país, mientras que los expertos sitúan en 600 el máximo recomendable.
Austria, que cuenta con una de las tasas de vacunación más bajas de Europa, se convirtió en el primer país de la zona en volver a imponer medidas de confinamiento ante la última ola de contagios. Luego lo siguió la vecina Eslovaquia, según publicó Télam.