En la víspera navideña, el ministerio de Salud de Santa Fe difundió una serie de recomendaciones para garantizar una cena segura y reduciendo al máximo las probabilidades de que los comensales sufran algún tipo de intoxicación.

Por intermedio de la Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria dieron a conocer las cinco claves establecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para mantener alimentos seguros y evitar enfermedades.

Conservar la higiene en las zonas de preparación de alimentos; consumir agua y alimentos seguros; cocinar completamente los alimentos; evitar la contaminación cruzada, y mantener los alimentos a temperaturas adecuadas”, destacó el secretario de la Assal, Eduardo Elizalde.

En ese sentido, el funcionario también remarcó que: “estos cinco puntos son esenciales para garantizar la inocuidad de los alimentos, siendo imprescindible el lavado correcto de manos con agua segura y jabón antes y durante la preparación de alimentos”.

Recomendaciones

  • Adquirir alimentos seguros: comprar productos rotulados y de establecimientos habilitados. Evitar la compra ambulante o en redes sociales de productos de origen desconocido.
  • Cuidar la refrigeración: no dejar las preparaciones a base de crema, mayonesa o salsas más de dos horas fuera de la heladera. Después de comer, refrigerar los alimentos lo antes posible y evitar dejarlos expuestos en la mesa durante horas.
  • Guardar en porciones pequeñas para ir sacando a medida que se desee consumir.
  • Contar con suficiente espacio en la heladera para guardar las preparaciones sobrantes, ya que en estas fechas suele haber una mayor cantidad de comida que lo habitual.
  • No utilizar el horno o el microondas para conservar alimentos, ya que no están diseñados para este propósito.
  • Prevenir la contaminación cruzada: utilizar utensilios diferentes (tablas, repasadores, cuchillos y platos) para manipular alimentos crudos y cocidos.
  • Cocinar completamente: asegurarse de que los alimentos no queden crudos en su interior, especialmente los trozos grandes de carne, pollos enteros, carne molida, pescados y huevos.
  • Transportar los alimentos al lugar de la reunión refrigerados en una conservadora, sin cortar la cadena de frío.  
  • Destinar una conservadora exclusiva para el hielo que será utilizado en las bebidas, evitando mezclarlo con alimentos o botellas y latas que pueden estar sucias.

Finalmente, Elizalde subrayó que “como consumidores, estamos expuestos a diferentes peligros, que pueden generar desde molestias pasajeras hasta enfermedades graves. Con pequeñas modificaciones en la manipulación de los alimentos durante esta época de calor, podemos prevenir enfermedades que opaquen  nuestras celebraciones”.

Para más información, ingresar a www.assal.gov.ar.