Choferes de taxis de Rosario se plegaron en el mediodía de este miércoles al bocinazo que organizó el sector a nivel nacional contra el arribo de la plataforma Uber y el pedido de vacunas para los conductores. La iniciativa se realizó frente a la sede del Sindicato en Salta al 2800.
“Los servicios públicos en manos privadas y sin regulación, es retroceder. Si se permiten estas aplicaciones, el transporte público de pasajeros tendrá un final no feliz”, señaló el titular del sindicato de Peones de Taxis, Horacio Gianotti.
En Rosario, el reclamo se da en el medio del pedido de dos concejalas de regular el funcionamiento de Uber en la ciudad y la negativa por parte del municipio de autorizarlos, salvo que se adapten a la normativa vigente.
En el reclamo, los conductores también sumaron el pedido para ser incluídos dentro de las prioridades del plan provincial de vacunación. “La actividad no paró nunca y fue una labor esencial para los ciudadanos, le pedimos a los funcionarios que nos tengan en cuenta y la vacuna sea inmediata”, añadió el gremialista.