Representantes de agencias de viajes, hoteles, transportistas y comerciantes de San Carlos de Bariloche se manifestaron en el Centro Cívico y describieron la situación económica de la ciudad, cuya actividad económica está basada en el turismo –hoy paralizado a causa de la cuarentena– como “terminal”.
“Hace cuatro meses que Bariloche está cerrado al turismo y no podemos resistir más”, aseguraron y pidieron la sanción de una ley de emergencia turística y ayuda del Estado superior a la que ya reciben, para paliar la crítica situación que atraviesan.
Además, solicitaron un plan de apertura de las actividades, ya que muchos de ellos se han visto obligados a elaborar productos alimenticios de forma casera y a salir a venderlos a fin de generar recursos para subsistir.