El sábado a la tarde se vivió un episodio que generó una fuerte conmoción en la Copa Pymes de fútbol, un torneo amateur que se desarrolla desde hace unos 15 años en la vecina ciudad de Funes, cuando un joven de 27 años se descompensó mientras jugaba un partido a causa de un paro cardíaco. La organización del certamen activó el “código rojo” y, finalmente, el despliegue de la atención médica dispuesta para emergencias junto a las maniobras de reanimación cardiopulmonar que le hicieron en el lugar, permitieron salvarle la vida al chico, que sigue internado “pero estable” en el Sanatorio Parque de Rosario.
Ismael Villegas Kalac es el director de Damfield Group, la empresa encargada de la organización del torneo, y brindó este lunes algunos detalles del episodio. Contó que “se estaba dispuando la séptima jornada de la Copa Pymes” cuando “a las dos y media de la tarde” el equipo médico y organizativo recibió un código rojo, señal que se activa cuando hay lesiones, accidentes o situaciones de impacto con riesgo de vida.
Tras el aviso, “se empezó a depslegar el sistema de abordaje con el personal de todas las áreas y la ambulancia que es una unidad de terapia intensiva móvil, todos se acercaron a la cancha” donde se encontraron un chico de 27 años que había sufrido “una descompensación y estaba sin pulso”. De inmeadito, toda la actividad en el predio se frenó y quedó suspendida.
“Fue una situación traumática pero se siguió paso a paso el operativo. Se armó una valla alrededor del chico y se le empezaron a practicar primeros auxilios”, dijo Villegas Kalac y mencionó especialmente a Sol, una chica que se desempeña como coordinadora de torneos: “Ella le empieza a realizar RCP mientras los médicos esplegaban todo el equipo”.
Luego de las primeras maniobras de reanimación, una ambulancia lo trasladó primero al Sanatorio Go de Funes. “Sufrió tres paros cardíacos desde que cayó al campo de juego hasta que lo pudieron reanimar”, contó el director de Damfield Group en el programa Punto Medio.
Según detallaron desde la Copa Pymes, el jugador llegó “estabilizado” al Sanatorio GO y posteriormente fue trasladado al Sanatorio Parque de Rosario, donde este lunes continúa internado y “estable”.
Un detalle que Villegas Kalac remarcó es que Sol, la mujer que inició con las maniobras de reanminación, no es médica. “Pero como todos los colaboradores tiene formación y capacitación en primeros auxilios y RCP para realizar eventos cardioprotegidos”, explicó.
“Cumpliendo con lo establecido en el protocolo de emergencia médica de Copa Pymes, en todas las fechas deportivas contamos con la presencia en el predio de ambulancia (UTIM), unidades médicas y DEA, asimismo, nuestro equipo recibe capacitación permanente en RCP y primeros auxilios”, expresaron los organizadores.
Este lunes por la tarde, el director del torneo manifestó que el joven se encuentra “estable” y que siguen en permanente contacto con su familia: “Le van a hacer una intervención para poder monitorear episodios futuros”.
Controles y riesgos
Hasta el momento no se conocieron detalles acerca de si el chico que sufrió el paro tenía o no alguna afección cardíaca preexistente, aunque desde la Copa Pymes explicaron que había presentado el “apto médico anual” que se le exige a todas las personas que se anotan para jugar en el torneo.
“Él tenía su chequeo médico en condiciones. Si tenía alguna cuestión (anterior), la tenía controlada o estaba apto para la actividad deportiva”, sostuvo Villegas Kalac, quien además contó que, según los médicos, “si los primeros minutos en la cancha no se le hubiera hecho reanimación, probablemente el desenlace hubiese sido distinto”.
“Hay variables críticas que no se negocian: hasta que no llegue la ambulancia no se puede jugar, tener personal, enfermería y todos los trabajadores capacitados. Muchas veces son cosas que no se ven”, agregó el director de la empresa organizadora.