Más allá que la atención está puesta en el próximo fin de semana largo –el último del año– en materia de turismo local, la Ciudad de Buenos Aires mira con expectativas la temporada de cruceros que acaba de empezar. Espera el amarre de 129 barcos con unos 479 mil visitantes extranjeros que le cambiarán la fisonomía a la capital del país al menos hasta abril.

Esos números significan un 10 por ciento más que el año pasado y representa el valor más alto en los últimos doce años. Para ello, el gobierno de Jorge Macri ha reforzado fundamentalmente la política en materia de seguridad y apela a los tradicionales circuitos porteños para captar la atención de los foráneos.

El pasado jueves arribó el primer crucero de la temporada a la estación de amarre en la zona de Retiro. A los extranjeros que llegan a CABA por otros medios se sumaron europeos, canadienses y americanos que bajaron de un inmenso barco que se distinguía a la distancia. Más hacia el verano se prevé que llegarán - vía marítima -preferentemente brasileros y de otros países del continente a través de dos itinerarios: el que conecta con el sur de Brasil y Uruguay, y otro que llega hasta Chile dando la vuelta por el Cabo de Hornos.

Estiman que un turista extranjero gasta unos 60 dólares al día durante su visita.

La temporada de cruceros aporta “un turismo adicional, una fuente de ingresos atípica con derrame económico, y por fuera del tránsito habitual en la Ciudad”, coinciden los funcionarios del gobierno local. Estiman que un turista extranjero gasta unos 60 dólares por día. Pero es una “submedición” ya que muchos paseos se los contrata desde el mismo barco y tampoco se cuentan los servicios que demanda el barco anclado ni las tasas que cobra por amarre el Estado nacional.

Desde el Observatorio del Ente Turístico de la Ciudad de Buenos Aires destacan que la mayor cantidad de recaladas esperadas se dará entre enero y marzo, “en especial por el clima para hacer este tipo de experiencias”. Varios pasarán al menos una noche amarrados al puerto porteño.

El turismo internacional es muy fuerte en CABA. Entre enero y agosto de este año llegaron cerca de 1,9 millón de turistas, un 6,12% más que el mismo período del año anterior. Apenas por debajo de los valores alcanzados en 2019 cuando se registró el mayor número de visitantes de la historia. El origen de los turistas son, en su mayoría, de Brasil, Estados Unidos, Uruguay, Chile y Perú.

La atención en la seguridad


 

La administración Macri le puso el acento a la gestión de la seguridad en tres ejes: “eliminar los piquetes garantizando la libre circulación en las calles y avenidas; liberar el espacio público de usurpaciones, acampes y ranchadas; y dotar a la Policía de la Ciudad de más recursos y tecnología para combatir el delito”.

Los funcionarios cuentan que, con la aplicación del protocolo antipiquete, si bien hubo unas 900 manifestaciones en lo que va del 2024 hubo “cero piquete”. Y que se eliminaron más de 12 mil ocupaciones ilegales de espacios públicos desde que arrancó la gestión.

La ciudad inauguró 100 puntos seguros. 

El gobierno apunta a tener la seguridad al alcance de la mano del vecino o turista. El último sábado se inauguraron 100 “puntos seguros” desde donde la gente puede comunicarse al 911 y denunciar cualquier situación. Estos “tótems” están en distintos puntos estratégicos de la ciudad, tienen una cámara y un intercomunicador para establecer la llamada con un operador, y son una verdadera novedad.

La División 911 es un centro de recepción de denuncias y coordinación de respuesta frente a situaciones de emergencia. Se atienden unas 10 mil llamadas por día y, aseguran, el tiempo de respuesta es de unos 4 segundos. Está conectado a cuatro grandes centros de monitoreo en toda la Ciudad con más de 15 mil cámaras que llegan a cubrir el 75 por ciento de la superficie del distrito.

Desde el 911 también se organizan los grandes dispositivos para eventos multitudinarios como recitales o partidos de fútbol. Su sede está ubicada en el barrio de Constitución.

Los atractivos


 

Así como sucedía con los inmigrantes que llegaban a Buenos Aires a principios del siglo pasado, la torre Monumental recibe hoy a los turistas que bajan de los cruceros.

La torre está ubicada frente al hotel Sheraton y está habilitada para subir hasta su piso sexto desde donde se pueden tomar fotos con vistas de la zona en 360 grados. Fue una donación de la colectividad británica por los primeros 100 años de la Revolución de Mayo y cuenta con un reloj inglés que sigue dando la hora exacta.

La Monumental fue ignorada durante años y hasta fue objeto de ataques y depredaciones posterior a la guerra de Malvinas. Más allá del ir y venir de laburantes hacia o desde las estaciones de trenes y colectivo, la torre hoy es uno de los atractivos para los visitantes.

Revitalizaron el circuito Caminito para la nueva temporada de cruceros.

La Ciudad le pone énfasis a la pasión que despierta el fútbol. Así es como se ha revitalizado el paseo de La Boca y Caminito con un circuito gastronómico y de compras cuyo principal punto es el mítico estadio de la Bombonera y los colores azul y amarillo.

Para no ser menos, el museo y el restaurante del estadio Monumental de River Plate son otros de los paseos más demandados en el barrio de Núñez donde también llegan los extranjeros.

En materia de espectáculos, los shows de tangos y el imán de los teatros de la calle Corrientes sigue siendo otro de los puntos elegidos por el turismo internacional. Por estas semanas es altamente recomendable el musical “Cuando Frank conoció a Carlitos” que recrea un imaginado encuentro entre Sinatra y Gardel en el teatro Astral.