La palabra más esperada. Este domingo se terminaba una nueva etapa de la cuarentena por la pandemia de coronavirus, y este viernes, el presidente Alberto Fernández, confirmó que todo el país ingresará a la nueva etapa del aislamiento hasta el 24 de mayo, excepto Buenos Aires. Sostuvo que la curva de contagios es la esperada pero que no es igual en todos lados y señaló que los lugares más complicados son justamente, la provincia de Buenos Aires y Capital Federal. Las 12 nuevas muertes que sumó este viernes el coronavirus en Argentina, fueron allí.
Pasadas las 20.30 comenzó la conferencia de prensa anunciada para las 20. En la mesa, el primer mandatario estaba acompañado del gobernador Axel Kicillof y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
"Estamos logrando los objetivos pero no hemos ganado la batalla", advirtió el jefe de Estado.
"No dejamos de prestarle atención a la economía pero lo que más nos preocupa es cuidar la salud de nuestra gente", dijo.
"Terminemos la discursion en la que nos han metido falsamente que nos quieren hacer creer que si abrimos la economía vamos a estar mejor", agregó y destacó que, justamente, los jefes políticos de los dos lugares más complicados, Kicillof y Larreta, están de acuerdo con mantener la cuarentena igual de estricta.
El resto del país, sin embargo, podrá habilitar más actividades. Es la cuarta fase de "reapertura progresiva", que supone un tiempo de duplicación de los casos de 25 días y habilita la circulación del 75 por ciento de la población. Las restricciones serán locales y los permisos dependerán de las autoridades provinciales. Las clases, en tanto, continuarán de forma virtual.
En tal sentido, todo indica que Santa Fe en general, y Rosario en particular, podrá sumar más actividades. Sobre Rosario, incluso, el presidente fue elogioso: "Rosario ha trabajado muy bien y ha podido superar en gran parte el problema". Felicitó también el esfuerzo de los gobernadores: "Quiero agradecerles porque trabajan maravillosamente bien".
Sobre las actividades que se reanuden, desconsejó fuertemente el uso del transporte público y dijo que en caso de volver a abrir, cada empresa deberá hacerse cargo del traslado de sus empleados.
Asimismo, cada trabajador deberá bajarse y usar la aplicación de telefonía móvil "Cuidar" de autotesteo, semejante a la que lanzó el gobierno santafesino.
Sobre tarifas, dijo que "no estamos en condiciones de aumentar nada"; y sobre las demoras en el pago del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) pidió paciencia. "El Estado va a estar para socorrerlos si lo necesitan", prometió.
Con cada renovación de la cuarentena, el gobierno nacional fue habilitando distintos rubros, aunque siempre con el mismo mensaje de mantener los cuidados sanitarios.
Esta semana, por ejemplo, se habilitaron para el Gran Rosario –la ciudad lleva ya 13 días consecutivos sin contagios–, los servicios de inmobiliaria, mudanza y la construcción con no más de cinco trabajadores. Pero en las localidades medianas y chicas, se abrieron más rubros.