Este lunes la Cámara de Senadores de la Nación retomó la discusión en comisiones del proyecto de ley Bases. La iniciativa es planteada por el oficialismo como la “herramienta fundamental” para que el país pueda despegar. Dentro del paquete de temas que se plantean, está el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (Rigi).
En su habitual rueda de prensa, el vocero presidencial, Manuel Adorni, defendió esta política que, según destacó, tiene por objetivo atraer capitales extranjeros. “Dará impulso a la economía, a las inversiones y al empleo”, afirmó y en ese sentido también agregó que permitirá “triplicar el nivel de las exportaciones en una década”.
“En la Argentina el PBI per cápita es el más bajo de los últimos 13 años, hace 10 que el empleo no crece y 15 que no se crean empresas de punta a punta. Lo único que ha crecido es el trabajo estatal o informal”, remarcó el funcionario..
Según detalló Adorni: “El Rigi establece una serie de beneficios impositivos sobre grandes inversiones que suelen ser a largo plazo. Inversiones de 200 millones de dólares en adelante que por supuesto, por el desastre macroeconómico generado en los últimos 20 años no se realizan”.
“En términos sencillos, inversiones a largo plazo no se dan si la política cambia permanentemente las reglas de juego”, resumió el vocero.
Además, desde el Ejecutivo salieron a desmentir las versiones y denuncias que vienen haciendo desde distintos sectores de la oposición. “El Rigi no es el saqueo al país y no ayuda a que los empresarios se lleven su dinero al exterior y menos aún va a fundir Pymes. Muy por el contrario, va a significar más empleo, más empresas pagando impuestos y el desarrollo de toda una cadena productiva”, aseveró.