El Club Alemán de Rosario es uno de esos lugares en los que el presente y el pasado, y también las culturas de diferentes pueblos, logran un mágico punto de encuentro. En un informe especial del programa Cada Domingo, por El Tres, quedaron al descubierto sus maravillosos rincones y los preciosos secretos que se guardan en el edificio del centro de la ciudad.
Durante la visita de El Tres, el presidente del Club Alemán, Federico Luchtenberg, ofició de guía y anfitrión. “Este Club Alemán estaba en calle Corrientes, donde está el ENET. Después de que Argentina le declaró la guerra a Alemania, se expropiaron todos los bienes de los alemanes, incluido el club. Este club se compró en 1965,” explicó. A pesar de los desafíos, el club ha mantenido un espíritu vibrante con aproximadamente 100 socios activos.
"La idea es mantener a los socios jóvenes, algunos hablamos un poco de alemán, pero te diría que el 95por ciento no habla ese idioma. Pero la cultura alemana es más que el idioma", agregó el presidente.
Uno de los lugares más emblemáticos del Club Alemán es su comedor. Un espacio lleno de recuerdos, donde los miembros celebran cumpleaños, festividades y, por supuesto, el famoso Oktoberfest. "El espacio cervecero es el corazón del club", confió Federico.
A medida que se va explorando el club, se va descubriendo la rica gastronomía alemana. El equipo de El Tres degustó salchichas alemanas, chucrut y carne de cerdo, un plato predominante en la cultura alemana. Pero la experiencia no termina ahí. En el club, también se puede conocer un juego tradicional alemán, los bolos o "Kiegerspiele". "Lo loco es que hay torneos mundiales de esto," señaló Luchtenberg, destacando la popularidad de este entretenimiento.
Antes de finalizar la visita, el anfitrión dio una verdadera clase sobre el brindis alemán. "El brindis alemán es una cuenta hasta tres por la alegría", precisó Federico.
El Club Alemán de Rosario es una joya cultural en la ciudad, que recuerda la historia y las tradiciones que los inmigrantes alemanes trajeron con ellos.