Este proyecto de alfabetización del CONICET, fue financiado por la Organización de los Estados Iberoamericanos en conjunto con UNICEF. El mismo alcanzó a más de 5 mil estudiantes salteños y tuvo como objetivo principal achicar la brecha educativa producida por la pandemia.
La idea comienza a finales de 2020, durante la pandemia, cuando los responsables de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) convocaron a la investigadora del CONICET Celia Rosemberg y su equipo. La invitación fue para aplicar estrategias que permitieran atender a la situación educativa de niños de comunidades originarias que viven en zonas rurales y contribuir, de ese modo, a saldar la brecha en aprendizajes, que se había profundizado debido a la crisis sanitaria del coronavirus, la falta de clases presenciales y el escaso acceso a recursos virtuales.
“La pandemia implicó muchos problemas en todos los niveles educativos, en todos los sectores sociales de todo el país. En el Chaco, por ejemplo, o en Salta, no sólo no tenían clases en las escuelas rurales, sino que tampoco tenían posibilidad de participar en clases virtuales para mantener la continuidad pedagógica conectándose a internet. De modo que esas comunidades, en las que ya los recursos materiales y humanos del sistema educativo eran más escasos, sufrieron en mayor medida el impacto de la pandemia”, advierte Rosemberg.
Una experiencia de alfabetización del CONICET
La propuesta constó de llevar adelante un proyecto con distintas comunidades ubicadas en los departamentos de Santa Victoria Este y Embarcación en la Provincia de Salta que, desde una perspectiva intercultural y bilingüe, partiera de la consideración de las necesidades de niños de jardín de infantes y el primer ciclo de la escuela primaria. El primer paso fue elaborar un diagnóstico sobre la situación de aprendizaje en relación a la lectura, escritura y vocabulario.
La investigación, que se llevó adelante entre 2022 y 2023, involucró diversas acciones orientadas a contribuir con el proceso de alfabetización; desarrollo de materiales pedagógicos, formación docente, seguimiento de intervenciones pedagógicas en las aulas, llegó a cinco mil estudiantes salteños.
A lo largo de todos estos años crearon no sólo materiales y libros para docentes, sino también libros infantiles y de lectura “etnográficos”, creados a partir de las observaciones y grabaciones de los niños realizadas en el marco de los proyectos.
“Ahora, para el proyecto de Salta específicamente, escribimos un libro para primer ciclo que recupera, en los textos y las propuestas de actividades de alfabetización, los fondos de conocimiento de la comunidad como punto de partida para los distintos aprendizajes. Además, integramos al proyecto una App para promover la alfabetización temprana en el hogar”, agregó Rosemberg.
El objetivo de esas publicaciones y de la experiencia científica en sí, fue recuperar la mirada de los niños respecto de su realidad, sus intereses, motivaciones y conocimientos, la lengua o variante lingüística de sus comunidades, para luego ponerlos en diálogo con otros conocimientos y formas culturales y con otros repertorios lingüísticos y discursivos.