Los niños pueden ser verdaderos genios si se los estimula correctamente desde que tienen capacidad para jugar. A través del juego y de actividades lúdicas los niños pueden sacar su máximo potencial. Si querés estimular a tus hijos o a tus alumnos, conocé las propuestas del portal Formación y estudios.
Las actividades las podés adaptar dependiendo de la edad que tengan los niños a los que te dirigís. Pero de forma general, son actividades aptas para cualquier edad, solo tené en cuenta su capacidad y pensá cómo enfocar la actividad para sacar el máximo provecho posible.
El desarrollo cognitivo se caracteriza por la forma en que un niño aprende, adquiere conocimiento e interactúa con su entorno. Se adquieren diferentes habilidades cognitivas a medida que un niño cumple ciertos hitos del desarrollo, pero un niño de cualquier habilidad se beneficiará de las actividades que promueven el aprendizaje activo. Como padre, madre o maestro/a, podés alentar el desarrollo cognitivo de los niños en las áreas de memoria, concentración, atención y percepción al incorporar actividades simples.
Canten canciones
Las canciones ayudan a que los niños trabajen la memoria por eso animá a los niños a cantar con vos. Reproducí canciones y música que les gusta a ellos; podés hacerlo en cualquier momento pero es importante hacerlo de forma regular. Además de estimular la memoria también estarás potenciando el buen uso del lenguaje.
Escuchen ruidos
Cierren los ojos e identifiquen ruidos lejanos, como pájaros cantar en mitad del bullicio de la ciudad. Hacé que los niños identifiquen los ruidos que escuchan a lo largo del día también. Así empezarán a comprender cómo los sonidos se relacionan con un entorno cotidiano, aprenderán a asociar los sonidos con diferentes conceptos.
El abecedario y las tablas de multiplicar
Hay canciones para recordar el alfabeto que a los niños les encanta y son una excelente idea para potenciar su memoria. También se pueden aprender el abecedario con libros o puzzles. Cuando tengan la edad suficiente trabajá de la misma forma las tablas de multiplicar. Cuanto más divertida sea la actividad más fácil le resultará recordar los conceptos.
Identifiquen palabras y letras
Este juego es ideal para niños pequeños. Solo tendrás que recortar cuadrados que contengan letras del abecedario en bonitos colores. Después mezclá todos los cuadrados y ponelos en diferentes zonas del lugar donde te encuentres. Revisá el abecedario con los niños y deciles que busquen las letras que corresponden por el orden que tienen y así, las pegarás en una cartulina en orden a medida que las vayan trayendo. Cuando lo terminen tendrán el abecedario formado en la cartulina y sentirán gran satisfacción del trabajo bien hecho y conseguido.
Elijan opciones
Una actividad destacada para estimular la inteligencia de los niños es darles la oportunidad de que sean ellos quienes tomen opciones y decisiones. De esta manera se les da la oportunidad de que sientan que tienen cierto control sobre las cosas que le rodean. Esto también les ayudará a potenciar su autoestima y a sentir que sus pensamientos también son válidos, ¡necesario para un buen desarrollo cognitiva y emocional!
Por este motivo, aprovecha cualquier oportunidad para permitir que los niños tomen decisiones, desde que elijan entre dos pantalones para ponerse la ropa por la mañana, que escojan entre dos actividades a realizar o que sean capaces de decidir qué opción cenar entre dos que les digan sus padres. Se sentirán más independientes y aprenderán a tener buenas decisiones en el futuro.
¡Preguntales!
Para que los niños aprendan a pensar por sí mismos y a desarrollar su pensamiento crítico, es necesario que se les hagas preguntas. Se pueden aprovechar cualquier momento diario para hacerles reflexionar. Por ejemplo, podés preguntarles por qué es necesario esperar en un semáforo antes de cruzar, por qué hay que bajar las escaleras despacio, por qué tiene que ir a dormir temprano, por qué un pájaro pone nidos en los árboles, por qué ladra un perro, por qué tienen que comer más fruta y verdura, etc.
¡Jueguen!
Lo que más necesitan los niños para estimular su mente en todos los aspectos es el juego. Se pueden jugar con artículos cotidianos, construir nuevos juguetes con elementos reciclados por ejemplo. También es importante que los niños tengan la oportunidad de jugar a juegos de mesa o juegos en el parque, ¡o simplemente jugar a la escondida en casa!