Sin embargo, no existe una única manera de aprender, puesto que la innovación también es constante en el campo pedagógico. En consecuencia, existen diferentes métodos que se alinean con los objetivos de aprendizaje que forman parte de diferentes procesos. Desde el portal Formación y Estudios definen los principales métodos:

1. Aprendizaje basado en proyectos y en el trabajo en equipo

El ser humano puede implicarse directamente en la elaboración de un proyecto integrado por diferentes fases y tareas. Es un enfoque eminentemente práctico que ofrece la posibilidad de desarrollar nuevas herramientas y habilidades. Con frecuencia, la dinámica llevada a cabo se realiza en grupo. Y el contexto del equipo es clave para potenciar el aprendizaje compartido, la colaboración y el descubrimiento de nuevas ideas.

2. Aprendizaje visual

El aprendizaje visual tiene una gran proyección desde la infancia hasta la etapa adulta. La información que está presente en imágenes y otros soportes visuales puede convertirse en un medio eficaz para facilitar el proceso de descubrimiento. En consecuencia, es un método que conecta de forma especial con el sentido de la vista. Su influencia en la actualidad puede percibirse más allá del campo académico. Por ejemplo, también es frecuente en la organización de reuniones de trabajo, conferencias y charlas en las que el ponente utiliza un soporte de apoyo para estructurar los datos principales (y que los asistentes puedan hacer un seguimiento del contenido).

3. Aprendizaje autodidacta: la lectura y la investigación

El aprendizaje, con frecuencia, se contextualiza en un ámbito en el que intervienen otros participantes. Por ejemplo, en el método centrado en proyectos, el conocimiento se amplía en colaboración con el equipo. Sin embargo, el ser humano también puede aprender de manera autodidacta a través de su iniciativa y su autonomía. Por ejemplo, la lectura es un tipo de aprendizaje que fomenta el descubrimiento de nuevas ideas y lecciones de forma autodidacta.

4. Método Montessori

El método Montessori es uno de los más admirados en la actualidad. Su enfoque está presente en numerosos centros educativos y también es una inspiración para muchas familias. Esta metodología se aleja de la propuesta convencional en la que un adulto actúa como un transmisor de conocimientos. En este caso, el propio niño es un auténtico maestro que destaca por su sabiduría y capacidad de descubrimiento. Por ello, el entorno de aprendizaje fomenta su autonomía.

5. Aprendizaje online (vinculado a la tecnología)

La innovación en el ámbito de la educación queda reflejada en el uso de la tecnología como un medio que ha marcado un punto de inflexión en la enseñanza. Este aprendizaje es un buen reflejo de ello puesto que, como puedes comprobar a través de la formación online, destaca por la accesibilidad, la flexibilidad y la cercanía. Por esta razón, se presenta como la alternativa ideal para muchos adultos que no pueden acudir a clases presenciales.

6. Metodología de educación al aire libre

En ocasiones, el aprendizaje y el descubrimiento se contextualizan en el ámbito del aula como ocurre en colegios, institutos y universidades. Sin embargo, el saber no está determinado por la conexión con un único tipo de espacio. De hecho, el contacto con la naturaleza es tan importante que el entorno de una institución educativa que cuenta con zonas verdes añade valor al centro. Las actividades al aire libre también fomentan la observación, la experimentación y la investigación. La elaboración detallada de un cuaderno de campo puede ser un buen ejemplo de ello.

Fuente: www.formacionyestudios.com