La decisión de Javier Pinola de irse a River sigue levantando polvareda en Arroyito. El vicepresidente de Central, Luciano Cefaratti, admitió sentirse "desilusionado como dirigente y como ser humano", le pegó duro a la dirigencia millonaria y explicó por qué la cláusula de salida del defensor era tan baja: "La ponen los jugadores antes de firmar como condición sine qua non para venir". El otro vice, Ricardo Carloni, también habló del tema con el programa De 12 a 14 (El Tres).
"En primer lugar, confirmo que anoche su representante (Marcelo Carracedo) nos comunicó que Javier había decidido ir a River. Nos sorprendió porque River ni se había comunicado con Central, como sí lo hizo Boca 48 horas atrás. Nos preguntaron y les dijimos que no estábamos dispuestos a dejarlo ir, Boca lo entendió y se cortó el diálogo en buenos términos", narró.
Cefaratti aceptó que "es una situación que nos perturba, no sólo por lo que significaba Javier para Central, sino porque siempre hemos hecho las cosas de manera transparente. Diez días atrás teníamos cerrado el contrato con el monto que había pedido Javier. Estaba todo dado para firmarse, pero desde ese día a hoy no hubo comunicación de una decisión tomada".
"Desde ya estoy desilusionado. Más allá del rol de dirigente, soy un ser humano y uno genera vínculos con las personas. Uno no juzga a los demás, cada uno abe lo que hace y por qué. Nosotros debemos contarle la verdad a la gente: nos podemos equivocar o no, pero hay muchos temas para hablar para que la gente comprenda".
Acerca de la agresión al colegio alemán (donde concurrían los hijos de Pinola), expresó su enérgico repudio: "Hay que actuar con razonabilidad y sin la locura que puede generar la cuestión emotiva o lo sentimental. Son cuestiones lamentables que uno repudia como club, porque las hemos sufrido muchísimas veces. Cuando esto pasa, hay algo que perjudica al club en su imagen. No depende de nosotros, pero lo debemos repudiar como sociedad".
E informó: "Pinola no va a jugar mañana por una decisión del club, independientemente de lo que quisiera él. Tiene contrato vigente, pero esto apela a demostrarle a todo el mundo que lo más importante de Central es la camiseta y el club. Por respeto a la gente, no puede jugar alguien que está en esta situación y que anoche, en vez de estar pensando en el partido, estaba con esto en la cabeza".
"Central pierde mucho. Pero la historia de Central no comenzó con Pinola desde hace dos años. Fue un jugador importante dentro y fuera de la cancha. Es un jugador de selección. Pero tenemos un mensaje de cara al futuro con mucho optimismo. A Central no lo va a opacar ningún nombre propio, pero sí nos molesta y nos duele la situación".
La cláusula de la discordia
"El tema de las cláusulas no viene de parte de los clubes: son condiciones que ponen los jugadores para firmar un contrato. Nosotros vendimos a Giovani (Lo Celso) y a Franco (Cervi), que tuvieron primer contrato en nuestra gestión y no tenían cláusulas. Hemos comprado a Marco (Ruben) y Leguizamón y no tienen cláusula. Cuando existe una cláusula y es baja, es porque fue una condición del jugador para firmar el contrato", comentó.
"Esta de Javier viene desde que él llega de Alemania, para firmar con Central o cualquier equipo. El jugador la pide, después el club decide. Nosotros decidimos que viniera porque estábamos convencidos de que iba a ser lo que finalmente fue. El caso de Larrondo fue igual, pero al final se cobró un millón de dólares más", agregó.
Según Ceffarati, "siempre depende de cómo se maneja el club que tenés enfrente. River vuelve a hacer lo que hizo en aquel momento con Larrondo. LEn cambio están los casos de Racing y Boca, con quienes la charla duró un minuto. Se lo podés preguntar a Blanco y Angelici. Llamaron al club y dijimos que no se negociaba. Y ahí se terminó".
"El club que supuestamente va a contar con Javier nunca se comunicó con nosotros. Hubo un contacto anoche de nuestra parte y no fue en los mejores términos. Porque fue su representante el que nos comunicó que Javier había decidido eso. Por eso es justo para la gente que le contemos todo. Para que no haya creencias erróneas: si no aceptas la cláusula, el jugador finalmente no viene", cerró.